El arzobispo de Caracas, Jorge Urosa Savino, pidió este miércoles a los dirigentes opositores presos que se encuentran en huelga de hambre cesar esta protesta, que calificó como una “medida extrema” que podría causarles “daños irreversibles”.
“Yo lamento mucho esto de la huelga de hambre, me parece a mí que es un gesto que por un lado manifiesta una gran generosidad y una gran disposición y sacrificio por parte de ellos, pero por otra parte es muy peligroso para su propia salud”, aseguró Urosa a Unión Radio.
El monseñor afirmó ser del parecer de que a los políticos presos no les conviene seguir adelante con esta huelga “que puede ciertamente causarles daños irreversibles”, especialmente en el caso de la protesta que mantienen los dirigentes de Voluntad Popular Daniel Ceballos y Leopoldo López.
“De manera que ojalá que ellos, habiendo logrado el objetivo de hacer ver al país y al mundo la situación tan difícil que se vive aquí desde el punto de vista político pues desistan de ese recurso que es un recurso extremo”, comentó.
Más temprano, miembros de la Mesa de la Unidad Democrática hicieron un llamado a López y Ceballos a terminar la huelga de hambre.
Ceballos inició una huelga de hambre el pasado 22 de mayo antes de ser trasladado a una cárcel de presos comunes en el estado Guárico, una medida de protesta a la que se sumó López dos días después.
Los huelguistas advirtieron entonces que no suspenderían la protesta hasta que no fueran atendidas sus exigencias entre las que se cuentan la liberación de los llamados presos políticos, el cese de “la represión” y “la censura” y la fijación de una fecha para las elecciones parlamentarias.
A esta huelga se han ido adhiriendo ya 17 personas, entre los que se encuentran otros detenidos y estudiantes. Globovisión
