Este 4 de junio, Día de Corpus Christi, 5.000 promeseros de los Diablos Danzantes de Venezuela salen a bailar ante los altares, para rendirse ante el Santísimo Sacramento del Altar, en una de la tradiciones más conocidas y características del país. Desde hace 266 años se celebra así esta fecha.
Los Diablos danzantes de Corpus Christi ingresaron, junto con otras 11 cofradías del país, a la lista representativa delPatrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad que aprueba la Organización de la Naciones Unidas para la Educación, Ciencia y la Cultura (Unesco), en París, el 6 de diciembre del año 2012.
Once cofradías, enraizadas en igual número de comunidades de Venezuela desde hace cerca de cuatrocientos años, se rinden ante el Santísimo Sacramento, el noveno jueves después del Jueves Santo, integrados a la celebración católica del Corpus Christi.
En cada una de estas comunidades, las vestimentas, los bailes e instrumentos utilizados son diferentes, pero tienen en común una ceremonia plena de religiosidad popular, devoción y fe desprendida, en la que concurren los elementos de las culturas africanas y originarias, en una tradición transmitida de padres a, signada por la participación popular, la resistencia cultural, el desarrollo de vínculos solidarios y la celebración de la espiritualidad.
Las diabladas, que hoy se consideran Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad, constituyen una expresión profunda de la venezolanidad y nos hacen sentir orgullosos de nuestra condición de pueblo multiétnico y pluricultural, perseverante y hermanado en la tarea de fortalecer nuestro destino de patria independiente y soberana.
Este reconocimiento de la Unesco a los Diablos Danzantes de Corpus Christi de Venezuela proyecta con intensidad al pueblo venezolano en el resto del mundo, desde una de sus prácticas culturales de mayor arraigo y trascendencia, y lleva un mensaje de amor, paz y solidaridad para todos los Pueblos.
Fuente: Marelys Gómez con información de Ministerio de Turismo