En octubre de 2010 fue sentenciado a la horca por perseguir a miembros de los partidos religiosos chiíes musulmanes, que ahora dominan Irak
Tariq Aziz, el cortés diplomático que se cobró fama al defender a Saddam Hussein del mundo durante tres guerras y que más tarde fue sentenciado a muerte por un régimen que mató a miles de los suyos, falleció el viernes a los 79 años en un hospital al sur de Iraq, informaron las autoridades.
Aziz falleció luego de ser trasladado al hospital al-Hussein en la ciudad de Nasiriyah, a unos 320 kilómetros (200 millas) al sureste de Bagdad, según informó el gobernador de la provincia Yahya al-Nassiri. Aziz estaba en prisión a la espera de ser ejecutado.
Aziz era el cristiano de mayor rango en el régimen de Hussein y fue el rostro internacional del mismo durante años. En octubre de 2010 fue sentenciado a la horca por perseguir a miembros de los partidos religiosos chiíes musulmanes, que ahora dominan Irak.
La religión de Aziz lo salvó de la horca, destino que tuvieron otros altos miembros del régimen, al ser el único cristiano dentro del círculo de Hussein.
Tras ser sentenciado a muerte, el Vaticano pidió clemencia para él por ser cristiano. El presidente de Irak en ese momento, Jalal Talabani, rechazó firmar su sentencia de muerte, citando la edad y religión de Aziz.
Sin embargo, incluso antes de ser sentenciado a muerte, Aziz parecía saber que moriría en prisión. Ya había sufrido varios derrames mientras estaba detenido y enfrentaba varios juicios por diversos crímenes del régimen.
«No tengo futuro, ningún futuro», dijo Aziz a The Associated Press con un frágil semblante y hablando con dificultad debido a un derrame reciente, durante una entrevista en prisión en septiembre de 2010, luego de ser sentenciado a más de dos décadas en la cárcel.
AP