Estados Unidos espera que la Organización de Estados Americanos (OEA) aborde las crisis políticas en Venezuela y Guatemala en los márgenes de la 45 Asamblea General del 15 y 16 de junio en Washington, que tiene como único tema en agenda la renovación del organismo.
La posible vuelta de Cuba a la organización, tras levantarse su suspensión en 2009, tampoco forma parte del calendario oficial y EE.UU. no espera «nada sustantivo» sobre este asunto en el marco de la reunión continental, explicó hoy una alta funcionaria del Departamento de Estado en una conferencia telefónica.
«En 2009, ya se estableció la hoja de ruta que Cuba debe seguir para volver a la OEA. Debe apoyar los acuerdos de la organización y eso es una decisión del Gobierno cubano, que hasta ahora no ha mostrado ningún interés en ello», añadió la funcionaria.
Estados Unidos considera «crucial» la Asamblea General de este año al ser la primera del nuevo secretario general, el excanciller de Uruguay Luis Almagro, y por tener como tema central «El presente y el futuro de la OEA», es decir, una profunda renovación reclamada desde hace años desde dentro y fuera de la organización.
Aunque no está en la agenda oficial, la crisis política de Venezuela será uno de los temas a abordar en las bilaterales de los márgenes de la cumbre, según la funcionaria estadounidense.
«Esperamos que, con el nuevo secretario general, la OEA tenga un rol importante para apoyar la democracia y los derechos humanos en Venezuela junto a organizaciones como Unasur (Unión de Naciones Suramericanas)», señaló.
Almagro ofreció esta semana a Venezuela la observación electoral de la OEA, uno de sus programas más reconocidos, para los comicios parlamentarios previstos para este año, aún por convocar.
El otro asunto que para EE.UU. es acuciante en el continente es la crisis política en Guatemala, con las protestas sociales que reclaman la dimisión del presidente, Otto Pérez Molina, tras la renuncia de su vicepresidenta, Roxana Baldetti, por denuncias de corrupción. EFE