El alcalde siciliano, de centroizquierda, se encuentra en Roma para una serie de reuniones con el primer ministro, Matteo Renzi, para coordinar una respuesta nacional ante el flujo incesante de emigrantes.
El alcalde de Palermo (Sicilia, sur de Italia), Leoluca Orlando, ha denunciado este jueves el «genocidio» que se comete en el Mediterráneo con la muerte de miles de inmigrantes y ha pedido la libre circulación para ellos en Europa.
«Estamos asistiendo a un genocidio y, en algunos años, vamos a tener que responder por ello», aseguró Orlando en un encuentro con la prensa celebrado en Roma.
El alcalde de la capital de Sicilia, una isla que cada año tiene que enfrentar la llegada de miles de inmigrantes y refugiados que huyen de conflictos y pobreza, considera que la única solución a ese drama es la de permitir legalmente la entrada a la Unión Europea.
«A los sirios, que provienen de un país en guerra, por lo que tienen derecho a entrar en Europa y obtener el estatuto de refugiados, habría que dejarlos tomar un vuelo directo hacia París y no obligarlos a recorrer Libia para embarcarse hacia el Mediterráneo», comentó Orlando, quien gobernó Palermo también en la década de los 80, durante los años más duros de la guerra contra la mafia. «Las historias que cuentan los supervivientes que llegan a Sicilia son terribles, parece que hubieran escapado de campos de concentración como los de Dachau o Auschwitz», asegura.
El alcalde antimafia, junto con múltiples organizaciones de defensa de los derechos humanos, condenó el «genocidio migratorio» que se está produciendo en el mar Mediterráneo y exigió al Gobierno italiano que impulse vías legales de ingreso a fin de evitar que los refugiados enriquezcan los bolsillos de los traficantes de seres humanos.
Desde el inicio del año, cerca de 60.000 inmigrantes llegaron a Italia y unos 1.800 han desaparecido en el canal de Sicilia.
Renzi prometió soluciones «éticas y razonables», según declaró este mismo jueves. «Los que piden asilo deben ser acogidos y los emigrantes económicos repatriados», afirmó, sin precisar los requisitos para dividirlos.
El creciente flujo de inmigrantes que llegan a Europa se ha convertido en un grave problema para los varios países del viejo continente, que no han logrado acordar una política común.
«Para que la solidaridad y la responsabilidad prevalezcan, se tienen que encontrar soluciones», escribió Renzi. «De lo contrario, predominan el egoísmo y el miedo, y nos arriesgamos a perder, incluso, la idea misma de lo que es Europa», advirtió.
Via AFP
