Jennicet habló en exclusiva con CNN sobre este percance en Washington donde la escoltaron fuera de La Casa Blanca por órdenes del presidente. La mujer de origen mexicano, defensora de los derechos de la comunidad transexual, recordó que en ese momento se sintió triste, humillada y dijo que no quiere que se olvide el problema de los indocumentados.
“Fue una experiencia muy fuerte, dolorosa y obviamente humillante. Pero sin embargo envié el mensaje. Creo que salí con dignidad, que es lo que nos quita siempre la sociedad”, dijo Jennicet.
Gutiérrez agregó que tuvo que “utilizar esa estrategia” (de gritar en público a Obama) porque quería que su mensaje fuera escuchado.
Además aseguró que cuando Obama le dijo que ella estaba como invitada en su casa, se sintió triste y sorprendida y guardó silencio por treinta segundos, «una eternidad».