Según Ramiro Llanos, exviceministro de régimen penitenciario de Bolivia, se trata de una cárcel en la que no hay control del Estado ni de la Policía.
Palmasola es un penal donde se pueden observar los extremos de las diferencias sociales y económicas. Un lugar donde los reos conviven con sus familias y donde más de un centenar de niños son prisioneros de la dura realidad de la cárcel que los hace más vulnerables.
Algunos analistas coinciden que la visita de Francisco a la cárcel de Palmasola es una interpelación al gobierno para eu ele Estado recupere las cárceles del país.