La noche del jueves se perpetró un robo masivo al interior de uno de los trenes del subterráneo entre Caño Amarillo y Agua Salud, perpetrado por un grupo de sujetos armados
El Metro de Caracas se ha convertido en el medio de transporte predilecto de la ciudadanía por su fácil acceso, costos accesibles y velocidad; no obstante, el gran número de personas que hacen uso de él a diario (calculado en aproximadamente 2 millones), la ha hecho un objetivo atractivo para la delincuencia.
El suceso más reciente ocurrió el pasado jueves, cuando se presentó un robo masivo al interior de uno de los trenes, que en ese momento estaba realizando el trayecto entre Agua Salud y Caño Amarillo. Según se reportó por las redes sociales, un grupo de sujetos armados entró al vagón y despojó de sus pertenencias a los usuarios, quienes señalaron que no había presencia de efectivos de seguridad en las estaciones antes referidas para realizar la denuncia.
“Esto ocurre a cada rato, ese mismo día, en la mañana, también robaron a una señora, le quitaron su celular, entre los trabajadores del Metro y los habitantes de la zona pudieron dar con él muchacho y entregarlo a las autoridades; pero ni un policía había para agarrar al malandro”, narró un trabajador del Metro de Caracas que prefirió reservarse su nombre por miedo a posibles represalias, quien agregó que este tipo de incidentes son perpetrados, en su mayoría, por jóvenes, algunos incluso menores de edad.
Asimismo, usuarios y trabajadores del Metro aseguran que al interior de las estaciones se presentan robos, arrebatotes, peleas con cuchillos e incluso asesinatos con armas de fuego. Por tal motivo le exigen los cuerpos de seguridad del Estado reforzar el patrullaje en el sistema de transporte masivo.
Adentro o afuera
“Afuera de la estación es seguro, nosotros también colaboramos con la seguridad, solo queremos vender nuestra mercancía sin molestar a nadie”, dijo un comerciante informal que no quiso que se publicara su nombre. “Pero en las instalaciones del Metro hay atracos a cada hora, incluso usan cuchillos; hace unos días atracaron dentro en los andenes, muchos otros arrebatan carteras o celulares para luego salir corriendo”.
Por su parte, operadores de en Caño Amarillo denunciaron que el hampa se ha adueñado de las estaciones del Metro de Caracas y que los efectivos policiales no se dan abasto para controlar la situación.
“Esto lamentablemente está pasando: asesinatos, atracos, robos, peleas; hacemos lo que podemos, pero no podemos con todo lo que ocurre en todas las estaciones”, dijo una fuente cercana a la Policía Nacional Bolivariana.
No es la primera vez que ocurren robos en las instalaciones del sistema ferroviario: el 30 de septiembre de 2014 se registró un robo masivo en la estación La Paz, de la Línea 2, en el que incluso resultó herido el reportero del Bloque de Armas “Cheche” Díaz. Asimismo, en el Ferrocarril Ezequiel Zamora que cubre la ruta Caracas-Valles del Tuy, el pasado mes de marzo un trabajador informal apuñaleó a un usuario quien luego falleció.
Víctimas
“La inseguridad está en todos lados, siempre estamos con el corazón en la boca, afortunadamente nunca me ha pasado nada grave, pero he visto cómo le sacan las cosas de las carteras a las mujeres o les roban”, dijo Manis Godoy, usuaria del Metro de Caracas. “Ahora estamos con el miedo encima, nos pegamos los bolsos al cuerpo para que nos metan la mano en las carteras”.
Vendedores informales
Otra de las quejas de los usuarios del Metro es la presencia de los vendedores informales al interior de las estaciones así como las personas que piden dinero en los vagones. “No son todos, pero hay muchos malandros que se hacen pasar por vende-chicles para luego robar a las personas, es mejor que ya nos les permitan entrar en las estaciones”, recomendó Godoy
Luís Guillermo Valera
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Fotógrafo: Jaime Manrique