Convertirse en padres es una de las tareas más arduas que existen y los primeros meses son, sin duda, los más duros. El nuevo hijo es un desconocido y es casi imposible no cometer algún error.
Es normal, estás en un proceso continuo de aprendizaje, aunque es posible evitar algunos de los más frecuentes si los conoces de antemano. Aquí van unos cuantos.
Como los padres perfectos no existen, conviene desdramatizar desde el primero minuto y asumir que, si bien es verdad que un bebé trae consigo toneladas de felicidad, su cuidado conlleva también mucho cansancio y un cambio radical de costumbres, almenos en los primeros meses según lo explicado por especialistas en la pagina web ABC.es.
Seguir los consejos al pie de la letra revistas, libros, programas de televisión, las amigas, la suegra , todo el mundo los bombardeará con consejos sobre embarazo, parto y cuidados del bebé.
El bebé se va a convertir en el centro de atención en casa, y no sólo las primeras semanas o meses. Los padres tienen que renunciar a una parte de sí mismos para ocuparse de sus retoños y hacerse a la idea de que ya no son sólo una pareja de enamorados.
El portal web consulta recomienda como tips que los padres compren las cosas que necesiten, pídanlas prestadas o pidan que se las regalen, pero no llenen la casa de cachivaches que no están seguros de que van a utilizar o necesitar, en unos meses no os servirán para nada y no sabrá qué hacer con ellos.
Una vez que el bebé ya está en casa, calma y buen humor,d esde ese momento hay tres cosas que preocupan especialmente a los padres, la alimentación, el sueño y el llanto del recién nacido.
DHR / LV