Definitivamente la amplitud y la comprensión del terrible trance que padecemos ha sido echado al cesto de la basura, sustituido por el sectarismo mas rastrero y el desconocimiento de nuestra historia
Cuando estamos a solo un mes de la inscripción de candidatos a diputados a las elecciones a Asamblea Nacional 2015, vemos cuan poco se ha aprendido en el terreno opositor al momento de lograr un gran acuerdo nacional que aglutine a la mayoría de las expresiones políticas, frente a un régimen que ha asolado a un país en su provecho.
Definitivamente la amplitud y la comprensión del terrible trance que padecemos ha sido echado al cesto de la basura, sustituido por el sectarismo mas rastrero y el desconocimiento de nuestra historia, actitudes que no se compadecen con la inteligencia de aquella clase política que postulaba parlamentarios por su experiencia, conocimientos y no solo por el obligatorio carnet del partido. Diputados independientes de la talla de Reinaldo Cervini, Miguel Henrique Otero, Maza Zavala, Rafael Pizani, Carmelo Lauria, Lolita Aniyar, entre otros, eran propuestos por socialdemócratas, socialcristianos e izquierdistas, quienes compartían en sus bancadas sus aportes al debate parlamentario.
Si bien es cierto queremos salir de esta pesadilla que desgobierna y maltrata al país, al mismo tiempo es fundamental que se exija un código de ética al parlamentario opositor electo, por ejemplo respetar al elector y no utilizar el cargo para aspirar de inmediato a cuanto cargo se le atraviese en el horizonte, sea a alcalde, gobernador. Como fuera el bochornoso espectáculo de 2010 donde el 50% de los diputados opositores abandonaran sus curules para optar a cargos ejecutivos municipales y regionales.
¿Cuántos de los diputados electos en 2010 por circuitos o lista en nombre de la Unidad han presentado balance de su gestión al elector?, ¿cuantos han justificado las vergonzosas inasistencias, que ameritaban hasta perder el cargo? incluso, hubo algunos que jamás tomaron la palabra en el parlamento y hoy sin rubor alguno aspiran de nuevo a ser diputados a la Asamblea Nacional 2015-2020.
Seguir presentando candidatos a diputados sin liderazgo reconocido, solo con el argumento que la gente votará por la oposición ante el hastío producido, evidentemente por el peor gobierno de nuestra historia, es subestimar y burlarse de un electorado que está cansado, fatigado de tantas promesas incumplidas y del abandono del diputado que eligió alguna vez.
Si la oposición aborda este proceso con la irresponsabilidad de otrora, sin una agenda parlamentaria factible, estará labrando el terreno a la desmovilización y a la frustración popular, para de esta manera facilitarle al régimen el control absoluto de una población que sufre la precarización, la manipulación y la superexplotación más feroz que haya conocido de quienes han ejercido el poder en este país.
Lograr la unidad nacional es un compromiso histórico no solo de quienes militen en partidos políticos, también es una obligación de quienes están en las diferentes expresiones de la sociedad civil. Para ello requiere que los primeros abran los espacios de participación, de lo contrario serán las últimas elecciones donde los partidos políticos expropian al resto de la población del derecho a ser representados legítimamente.
Movimiento Laborista
Froilán Barrios Nieves