Continuas agresiones verbales, físicas y todo lo que incluye la violencia de género contribuyeron a firmar el acta de defunción de Mildreth Josefina Rodríguez Bolívar, de 30 años, asesinada la noche del martes en manos de su compañero sentimental.
El crimen fue reportado en el sector La Llovizna en la población de Upata. Una nueva historia que cuenta el drama de las mujeres maltratadas.
Un relato que a pesar de los esfuerzos de las instituciones, sigue ocurriendo porque muchas veces las víctimas, en su intento de cambiar al hombre de su vida y de salvar sus matrimonios, se resguardan en su peor enemigo: el silencio. Versiones tristes que culminan en lamentos y que a final de cuenta solo terminan perjudicando a los más pequeños de la casa.
Una discusión…
Esta vez Mildreth Josefina se sumó a la fatal lista de este círculo vicioso. Y es que su concubino David, alias La Liebre, ante la mirada inocente de sus niños, la mató.
Testimonios dan cuenta que el individuo llegó a su residencia, presuntamente, bajo los efectos del alcohol y sustancias estupefacientes.
A los pocos minutos de su estadía inició una acalorada discusión con su pareja, que pasó a los golpes y al ataque brutal con un cuchillo.
Ante la violenta embestida, la mujer quedó inconsciente y el hombre, no conforme con la agresión, lanzó toda la ropa al suelo y con kerosene le prendió fuego.
En su intento de despistar el episodio y de simular una explosión, colocó en la habitación dos bombonas de gas, cerró la puerta principal de la casa y huyó por la puerta trasera.
Agonía…
Vecinos y familiares indicaron que la situación se tornó extraña cuando todo quedó en silencio, pues las peleas eran cotidianas en la familia y la mujer solía salir de la casa para reposar o “pasar el trago amargo”.
En vista de la sospechosa situación del humo que emanaba de una de las habitaciones, uno de los parientes decidió entrar a la casa y observó el cuerpo agonizante de la mujer, a su lado a los niños en pánico y el fuego acechándolos.
Enseguida, familiares trasladaron a Mildreth al Hospital Gervasio Vera Custodio, pero debido a la gravedad de las heridas en la pierna izquierda -en el femoral-, a los golpes y quemaduras en distintas partes del cuerpo, la víctima murió.
LV