Wilmer Suárez: ¡Operación Salamandra! (I)

Foto de archivo de un hombre depositando un voto en una estación electoral de Caracas, sep 26 2010. La decisión de llevar a cabo las elecciones presidenciales venezolanas en octubre del 2012, dos meses antes de lo usual, no pretende beneficiar a ningún bando político y responde a un criterio logístico, dijo un rector de tendencia opositora del ente electoral.     REUTERS/Carlos Garcia Rawlins

El término “gerrymandering”, tropicalizado como “Salamandra” es, en esencia, una invención periodística que suele utilizarse para resumir los intentos de un gobierno para manipular las circunscripciones de votación (uniéndolas o separándolas) y así provocar distorsiones que le permitan mantener el poder

Hace unos meses, el investigador venezolano Eugenio G. Martínez, alertó sobre la llamada “Operación Salamandra”, un interesante trabajo en el que hace un llamado de atención a la oposición venezolana sobre el futuro del próximo proceso electoral del 6 de diciembre, pero la Mesa de Unidad Democrática (MUD), se hizo la vista gorda.
La oposición a la revolución bolivariana resultó afectada en el cómputo global de diputados por una mezcla de factores legales, incluidos en la nueva Ley Electoral, entre los cuales se incluye el diseño de las circunscripciones, aunque éste no sea el único elemento a considerar.
En ese trabajo de investigación, Eugenio Martínez señala, que según un estudio comparado de legislaciones electorales realizado por la Red de Conocimiento Electoral –instancia promovida por la Organización de Naciones Unidas, en colaboración con organismos electorales de todo el mundo-, hay 112 países que tienen leyes que ordenan la creación de circunscripciones por igualdad o equivalencia de población, 50 que se decantan por respetar los límites o las barreras naturales, 33 que optan por un sistema que privilegia la densidad de población y 41 que prefieren elaborar sus circuitos por extensión geográfica.
Sin embargo, la Ley Electoral aprobada en el año 2009 por los diputados del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) y del Partido Comunista de Venezuela (PCV), hicieron que el país entrara en la lista de los 37 países que permiten la construcción política de las circunscripciones electorales. En la lista de los otros gobiernos que siguen esta práctica destacan Angola, Burkina Faso, Burundi, Botswana, Cuba, Guinea, Guyana, Indonesia, Madagascar, Moldavia, Marruecos, Zambia y Zimbabue.
A pesar de estos referentes, hay casos en los cuales la modificación de circunscripciones no es negativa: Se conocen como affirmative gerrymandering y se considera una distorsión afirmativa de las circunscripciones. Por ejemplo: cuando se permite crear circuitos de votación para permitir que algunas minorías obtengan representación en cuerpos colegiados. El ejemplo clásico de esta distorsión positiva es el efecto de la Ley del Derecho al Voto de los EE. UU., que permitió la manipulación de las circunscripciones para garantizar la representación de minorías étnicas.

La tesis de gerrymandering
¿es buena o es mala?
El término “gerrymandering”, tropicalizado como “Salamandra” es, en esencia, una invención periodística que suele utilizarse para resumir los intentos de un gobierno para manipular las circunscripciones de votación (uniéndolas o separándolas) y así provocar distorsiones que le permitan mantener el poder.
El origen del término se remonta al año 1812, en una caricatura atribuida a Gilbert Stuart y publicada por el Boston Gazette en la cual se ilustraba (en forma de dragón, una ‘salamandra’ mitológica) los nuevos circuitos de votación del estado de Massachusetts. La denuncia era que estos circuitos permitirían la victoria del candidato del Partido Republicano, el gobernador Elbridge Gerry. Eso bastó para que surgiera un término que asociara a su apellido y consalamander (“salamandra” en inglés). Ya en 1848 el término formaba parte del Oxford English Dictionary.

¿Qué es el gerrymandering?
u “Operación Salamandra”

Considera Eugenio Martínez que usted como lector (y como elector), debe saber que no es cierto que tan sólo el cambio de las circunscripciones provocó que la oposición no obtuviera las curules que le correspondían por representación proporcional en los comicios del año 2010.
Pero si bien la modificación que se realizó en el sistema electoral venezolano a partir del año 2009 con la aprobación de la Ley Orgánica de Procesos Electorales (Lopre) va más allá del tema de los circuitos de votación, es muy probable que las palabras circunscripciones y gerrymandering estén presentes en el debate político-electoral de las próximas semanas.

Cómo es la cosa en Venezuela

Básicamente, la Ley Electoral establece varios tipos de circunscripciones. Para la elección de Presidente de la República, la circunscripción es todo el territorio nacional. En el caso de los comicios para elegir a gobernadores, la circunscripción es el estado o la entidad federal. Y para las elecciones de alcaldes son cada uno de los municipios. Sin embargo, en el caso de los cuerpos deliberantes las circunscripciones se definen de acuerdo con el tipo de elección.
Para las elecciones parlamentarias, las circunscripciones son de dos tipos: la primera es la Elección Estadal (conforme a la división político territorial), donde los diputados se eligen por listas cerradas y bloqueadas: los electores no votan por un candidato, sino por la tarjeta de un partido; y la Elección Nominal, que corresponde a las circunscripciones que se crean dentro de los estados uniendo municipios, parroquias y nuevas unidades territoriales (como las Comunas, aunque estén previstas en algunas leyes pero no en la Constitución Nacional). Esas Circunscripciones Nominales pueden ser, a su vez, de dos tipos: Uninominal (cuando se escoge un solo diputado) o Plurinominal (cuando se escogen dos o más diputados). Para las elecciones parlamentarias de 2010, el CNE conformó 87 circunscripciones en todo el país. De ese total, 68 son uninominales y 19 son plurinominales.
Las entidades donde los rectores decidieron conformar únicamente Circunscripciones Uninominales fueron Amazonas, Apure, Cojedes, Delta Amacuro, Falcón, Guárico, Mérida, Nueva Esparta, Portuguesa, Táchira, Trujillo, Yaracuy y Zulia. Y los estados donde el CNE conformó únicamente circunscripciones plurinominales son Barinas, Lara y Vargas. Estos dos comportamientos se diferencian de lo que sucede en Anzoátegui, Aragua, Bolívar, Carabobo, Distrito Capital, Miranda, Monagas y Sucre, donde hay circunscripciones de todo tipo.
En nuestra próxima entrega les estaremos explicando, ¿Cómo se diseña una circunscripción de votación y cómo saber cuántos diputados elige un estado?

Wilmer-Tip

**** Cosas de fin de mundo o de raspado de olla: Me escribe Cicerón para decirme que sería interesante que las autoridades del Ministerio Popular para la Defensa se dieran un paseíto por las instalaciones del Instituto Autónomo Círculo Militar y averiguaran el abuso, presuntamente, que están cometiendo las autoridades encargadas de dirigir tan prestigiosa institución castrense. El caso es simple: Están revocando si razón, ni derecho, a la mayoría de las concesiones que legalmente prestan sus servicio en tan bella zona recreacional. Lo grave, según nos relatan, es que quieren despojar de sus pertenecías a estos concesionarios, le rompen los candados y toman posesión ilegalmente de sus pertenecía.
Las preguntas de lo que ahí suceden serían: ¿Quiénes se quedan con esas pertenencias y quien dio la orden para tan arbitrario y desaguisado procedimiento, tomando justicia por su propia mano?

A Calzón Quitao
Wilmer Suárez
Twitter: @acalzonquitao54

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