El ataque se produjo un día después que Estados Unidos desplegara seis cazas F-16 en la base aérea turca de Incirlik
El Consulado de Estados Unidos en Estambul fue atacado el lunes a balazos por dos mujeres, supuestas militantes del partido de izquierda radical DHKP/C, confirmó el gobernador de la principal metrópolis turca, Vasip Sahin.
Nadie murió en el ataque y ambas pudieron escapar en un primer momento tras enfrentarse con la policía, que lanzó una operación en la región con el apoyo de helicópteros para tratar de arrestarlas.
La policía turca consiguió finalmente detener a una de las mujeres cuando se refugió en un edificio de apartamentos, informó la emisora CNNTürk. Sahin precisó que la mujer detenida estaba herida cuando fue encontrada por los agentes.
El ataque se produjo un día después que Estados Unidos desplegara seis cazas F-16 en la base aérea turca de Incirlik (suroeste del país, cerca de Siria), para la lucha contra el grupo yihadista Estado Islámico (EI).
Según el diario Milliyet, la detenida fue identificada como Hatice A., una enfermera de 51 años y militante del partido de izquierda radical DHKP/C, excarcelada el pasado mes tras pasar un tiempo en prisión.
El Partido-Frente Revolucionario de Liberación Popular (DHKP/C) atacó en febrero de 2013 la embajada de Estados Unidos en Ankara, lo que causó dos muertos y tres heridos.
Otros medios turcos aseguran que la detenida sufrió heridas de bala y tiene problemas cardíacos, por los que ha sido hospitalizada.
Este ataque contra la misión estadounidense se produjo después de un atentado suicida en la madrugada contra una estación de policía en un suburbio de Estambul, en el que murió el atacante y un policía.
En el operativo para encontrar a los responsables, dos supuestos terroristas fueron abatidos por las fuerzas de seguridad turcas.
Más tarde se produjeron otros dos ataques, ambos en la provincia de Sirnak, en el sureste del país, que provocaron la muerte de cuatro policías y un soldado.
Nadie se ha atribuido hasta ahora esos ataques, aunque el Gobierno acusa al ilegal Partido de los Trabajadores de Kurdistán (PKK), que a finales de julio rompió un alto el fuego que duró más de dos años.
Vía EFE