¿Será hora de redimir y reconocer al más antiguo texto sobre el amor erótico del mundo como un hito literario del rico legado de India?
Wendy Doniger, experta en India de la Universidad de Chicago, quien ha escrito media docena de libros sobre el hinduismo, piensa que sí.
Al fin y al cabo, el Kama sutra es posiblemente el tratado más celebrado sobre amor y sexo.
Si buscas en Google «Kama sutra», aparecen más de 17 millones de resultados en menos de un segundo. Condones, juguetes, correas de reloj, aplicaciones, chocolates, series de televisión y películas Kama sutra.
Esa puede ser una de las razones por las que Doniger, quien también publicó una traducción del Kama sutra, quiere rescatar el libro de «la enorme incomprensión de la mayoría de la gente».
«Creen que es un libro bobo sobre posiciones sexuales, o un libro obsceno y les da vergüenza leerlo», le dice Doniger a la BBC.
Sofisticado
«Quiero que los lectores sepan que es un libro fascinante sobre las interacciones sutiles entre hombres y mujeres en un mundo altamente civilizado, que está lleno de observaciones psicológicas profundas y muy buenos consejos sobre cómo casarse, como mantener el matrimonio y, sí, cómo ser adúltero».
En su libro «La trampa de la yegua», el Kama sutra es un texto sofisticado y valiente que asume un tipo de libertad sexual para las mujeres que alarmaría a los censores puritanos de hoy en día.
Por un lado, durante la mayor parte del libro, Vatsyayana deja a un lado la idea de que el sexo es para procrear y se preocupa solamente porque se alcance el placer sexual.
De alguna manera, cuestiona el dharma (las responsabilidades morales de los hindúes) de la fertilidad, establecidas en un antiguo texto hindú –Leyes de Manu– que dice que el hombre tiene el deber de tener relaciones sexuales con su esposa durante su período fértil.
El Kama sutra tampoco condena tanto el adulterio.
Vatsyayana dedica todo un capítulo a «instrucciones cruciales para el hombre que quiere cometer adulterio, detallando cientos de estratagemas mediante los cuales puede acostarse con las esposas de otros hombres».
Aunque, al mismo tiempo, le incomoda el tema, así que al final les recomienda a los hombres que no lo hagan y que cuiden a sus esposas.
Dinero, orgasmos, affaire
El Kama sutra, según Doniger, también es mucho más abierto que las Leyes de Manu sobre «el acceso a dinero, divorcio y la posibilidad de volverse a casar tras enviudar» para las mujeres.
El poder absoluto que tiene la mujer en la gestión de las finanzas domésticas contrasta con la declaración de las Leyes de Manu que dice que una esposa «no debe tener mucha libertad para gastar».
Además, argumenta la experta, los argumentos de Vatsyayana a favor del orgasmo femenino son «mucho más sutiles que la visión dominante en Europa hasta hace poco».
«Las ideas del Kama sutra sobre género son sorprendentemente modernas, y sus estereotipos sobre la naturaleza femenina o masculina son inesperadamente sutiles», escribe Doniger.
El autor indio también rechaza la tendencia tradicional patriarcal de los antiguos textos que recomendaba crueles castigos para cualquier mujer que se acostara con un hombre que no fuera su esposo.
El Kama sutra se preocupa por darle información a las mujeres sobre formas de ponerle fin a un affaire, revela ideas sorpresivamente modernas respecto a asuntos de género, no es nada prejuicioso frente a la homosexualidad y tiene comentarios que apuntan a la bisexualidad.
Entonces, ¿es el Kama sutra un libro feminista sobre amor erótico?
«Yo no lo catalogaría como un libro feminista en el estricto sentido de la palabra, pues su propósito primordial no es defender los derechos de las mujeres, y gran parte está dirigida a los hombres, con consejos para que sepan cómo manipular a las mujeres», responde Doniger.
«No obstante, es útil, en mi opinión, para las feministas en sus argumentos sobre la igualdad de las mujeres, su derecho al placer sexual, a vivir con una pareja que sea compatible con sus intereses y talentos, y mucho más».
Doniger piensa que este «libro asombrosamente sofisticado» –que ya era muy conocido en India cuando «los europeos todavía estaban colgando de los árboles, cultural y sexualmente hablando»– sigue siendo muy significativo en la actualidad.
«Su psicología básica llama la verdad una y otra vez, y el nivel de violencia sexual en nuestro mundo hace que un libro como este, que nos enseña cómo controlar el lado oscuro de nuestros impulsos sexuales y respetar los sentimientos de nuestras parejas, sea importante: en particular, previene a los hombres precisamente sobre el tipo de sexualidad incontrolada que a menudo se expresa en la violación».
«Así que sí, me parece que es muy relevante en el siglo XIX».