Pablo Natera González, de 72 años, trabajó en el comercio, estaba retirado y vivía de su pensión del Seguro Social. Sujetos lo asesinaron cuando llegaba a su residencia en la UD-3 de Caricuao
De un disparo en el pecho asesinaron a Pablo Natera González (72), cuando llegaba al estacionamiento de su residencia, en el sector UD-3 de Caricuao, el miércoles a las 9:30 de la noche.
Natera trabajó en el comercio, estaba retirado y vivía de su pensión del Seguro Social. Iba entrando al estacionamiento, a bordo de su carro Toyota Yaris, año 2008, azul, cuando lo interceptaron dos hombres que aparcaron una moto fuera del garaje.
Desde el piso 12 del edificio sus familiares observaron lo ocurrido. Natera les entregó las llaves del carro, pero hubo un forcejeo, al caer herido Natera los delincuentes huyeron.
Inmediatamente se movilizaron familiares y vecinos, lo llevaron a la clínica Loira, de El Paraíso, pero fue ingresado sin signos vitales.
Rito santero
Al mecánico y electricista Jean Carlos Concepción (40) lo encontraron muerto en la casa donde residía, en el Bajo Paují, sector rural del municipio El Hatillo.
Era santero, cuidaba esa casa que era un depósito de su padrino Julio Rivero, quien hizo el hallazgo.
El cuerpo estaba encima de la cama, atado, degollado y con signos de tortura. Sospechan de un joven de 20 años, con quien Concepción mantenía una relación, porque sostuvieron una discusión, el sospechoso regresó luego con cinco hombres y los vecinos escucharon el tropel.
No descartan que el crimen haya ocurrido en medio de un rito de santería.
