Si algo nos han enseñado las películas de Hollywood, es que existen decenas de formas de evitar la cárcel. Algunos lo hacen huyendo de la justicia y marchándose a otro país. Otros, por el contrario, prefieren esconderse durante un tiempo para evitar que la policía les atrape. Sin embargo, el británico Alan Knight, de 48 años y residente en Sketty, ha ideado una farsa para evitar las rejas que es digna de un largometraje, pues ha fingido durante nada menos que dos años que estaba en coma para poder vivir plácidamente en su casa.
Tal y como afirma la versión digital del diario «Daily Mail», la historia de este sujeto comenzó hace algunos años, cuando decidió ser más listo que uno de sus vecinos (un anciano con demencia senil) quitándole paulatinamente de su cuenta bancaria pequeñas cantidades de dinero. Poco a poco, la suma terminó ascendiendo hasta las 41.000 libras, lo que hizo sospechar a las autoridades de la región. Tras una investigación previa, la policía citó al hombre para interrogarle.
¿Qué hizo Knight para evitar la citación? Urdió un complicado plan con su mujer -Helen, de 33 años- según el cual ella debía informar a las autoridades de que no podía declarar debido a que se había quedado en coma tras sufrir un trágico accidente con la puerta del garaje (en la cual, presuntamente, se había fracturado el cuello). De esta forma, la pareja inició un peligroso juego de mentiras con el que consiguió eludir a la policía durante dos años gracias a todo tipo de trucos como realizarse fotografías con un respirador.
