El secretario general de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur), el expresidente colombiano Ernesto Samper,declaró este viernes “compartir” la petición del Gobierno de su país de convocar una reunión de cancilleres del ente regional para abordar la crisis fronteriza con Venezuela.
“Comparto totalmente la petición del presidente de Colombia, Juan Manuel Santos. Creo que la crisis ha escalado a unos niveles que requiere una intervención mayor”, afirmó a Efe Samper, de visita en Santiago de Chile.
Samper aseguró que el consejo de cancilleres de la Unasur puede ser “un buen escenario” para discutir “de manera tranquila” y “sin angustias bilaterales” la situación que se está viviendo en la frontera de Táchira y el Norte de Santander, derivada de la decisión del presidente Nicolás Maduro de cerrar parcialmente el paso.
“Creo que (la reunión) sería una buena ocasión para crear nuevas reglas de juego que permitan manejar las dificultades que están afrontando Colombia y Venezuela”, sostuvo.
El expresidente colombiano también se refirió a las fuertes críticas que está recibiendo en su país por su supuesto alineamiento con el presidente Maduro, especialmente tras la publicación de un tuit en el que consideraba real el peligro de intromisión de paramilitares colombianos en Venezuela.
“He tratado de mantener una neutralidad pero sin indiferencia”, afirmó Samper quien insistió que según lo dispuesto por el Tratado Constitutivo de la Unasur no se puede mediar en la crisis binacional si no hay petición de los dos países involucrados.
“Obviamente me afecta lo que está sucediendo en mi país pero creo que el mayor aporte que puedo hacer, y ojalá eso lo entiendan los dirigentes colombianos, es buscar fórmulas conjuntas para superar estas difíciles circunstancias”, agregó.
Para Samper, hasta el momento la Unasur ha aportado “dos importantes elementos de juicio en el conflicto”.
El primero de ellos consiste en la petición a los defensores del pueblo de los dos países de que “velen por los derechos humanos de los que en este momento están siendo deportados de la frontera”.
En segundo lugar, el organismo solicitó la búsqueda de “mecanismos conjuntos” para intervenir en el caso de que el crimen organizado entrara y se estableciera en Venezuela.
“Son dos temas totalmente distintos” aclaró el expresidente quien propuso que ambas cuestiones se pusieran en la mesa de debate.
Sin embargo, el ministro de Relaciones Exteriores de Uruguay, Rodolfo Nin Novoa, país que ocupa la presidencia pro témpore de la Unasur, dijo que será difícil convocar para la próxima semana la reunión sobre la crisis colombo-venezolana por la apretada agenda de los cancilleres.
Nin, encargado de convocar este encuentro, explicó que tras recibir ayer la solicitud de reunión por parte de la canciller colombiana, María Ángela Holguín, ha comenzado la ronda de contactos y algunos ministros le han confirmado que estarán de viaje en los próximos días.
“He constatado en estas conversaciones telefónicas que la agenda de los cancilleres está muy compleja”, comentó el ministro uruguayo.