En su paso por el Caribe dejó 20 muertos
La otrora tormenta tropical Erika se disipó en las primeras horas del sábado cuando sus restos empezaron a descargar lluvias intensas sobre el este de Cuba, pero en su camino causó una gran destrucción y dejó al menos 20 muertos y 31 desaparecidos en Dominica, una isla pequeña en el Caribe oriental, dijeron las autoridades.
Reducida a onda tropical, Erika dejó «lluvia fuerte, localmente intensa sobre todo en las zonas montañosas» en las provincias de Guantánamo y Santiago de Cuba, a unos 900 kilómetros al este de La Habana.
«Desde el amanecer de este sábado llueve intensamente en Baracoa, provincia de Guantánamo» informó el noticiero del sábado de la televisión cubana y mostró imágenes de las calles casi desiertas de esa ciudad y algunas personas protegiéndose con paraguas.
En esa provincia se suspendió el traslado de los estudiantes que debían viajar a los centros de enseñanzas para el comienzo del curso escolar el martes.
En Santiago de Cuba «amaneció lloviendo desde las seis de la mañana del sábado, con apagones (corte de electricidad) discontinuos y rachas de vientos de hasta 60 kilómetros por hora» reportó la televisión cubana.
Además se informó que en Santiago de Cuba 249 personas se evacuaron a centros estatales que los recibieron y además unas 1500 personas también se evacuaron a casas de familiares en tanto se suspendieron los vuelos en el aeropuerto de esa ciudad.
Hasta el momento no se registraron pérdidas humanas ni se precisó de daños materiales importantes.
En Haití, una persona murió en un alud de barro al norte de Puerto Príncipe y otras cuatro se mataron en un accidente de tránsito aparentemente causado por la lluvia.
El Centro Nacional de Huracanes en Miami dijo que la tormenta se había reducido a una depresión de baja presión debido a las montañas y un ambiente desfavorable en La Española.
AP