El mandatario defendió que su política exterior ha tenido “desde el primer momento” un “estilo pragmático, donde la diplomacia y el diálogo deben primar”, y aclaró que “la firmeza no quiere decir gritar más” sino tener “una posición clara y firme frente a una situación”
El presidente colombiano, Juan Manuel Santos, afirmó este lunes que su Gobierno mantendrá su política de firmeza y diplomacia en busca de una solución a la crisis fronteriza con Venezuela.
“Vamos a continuar con esa política de firmeza y al mismo tiempo con prudencia y diplomacia”, declaró Santos según un comunicado difundido por la Casa de Nariño, sede del Gobierno.
El mandatario defendió que su política exterior ha tenido “desde el primer momento” un “estilo pragmático, donde la diplomacia y el diálogo deben primar”, y aclaró que “la firmeza no quiere decir gritar más” sino tener “una posición clara y firme frente a una situación”.
Señaló que “desde el primer día” han insistido en el diálogo directo con Venezuela y que el “paso a seguir” han sido los organismos multilaterales.
“De ahí que yo le haya pedido a la canciller, María Ángela Holguín, convocar a la OEA (Organización de Estados Americanos), a los cancilleres de la OEA y a los cancilleres de Unasur (Unión de Naciones Suramericanas) que son las dos instancias que tenemos, regionales, para ponerlos en conocimiento de la situación”, sostuvo.
“Colombia es una nación civilizada y Colombia seguirá en ese camino: firme, con toda la prudencia del caso, defendiendo sus intereses y defendiendo sus derechos”, añadió Santos durante un acto oficial.
Este lunes el Consejo Permanente de la OEA se reunirá en Washington, a petición de Colombia, para decidir si se convoca una cita de cancilleres en la que se aborde la situación entre ambos países.
Colombia también solicitó un encuentro de ministros de Exteriores de la Unasur, que se llevará a cabo el próximo 3 de septiembre en Quito, sede de ese organismo, según anticipó el viernes pasado en Bogotá la canciller colombiana.
El pasado miércoles 19 de agosto, el presidente Nicolás Maduro ordenó el cierre de la frontera entre Táchira y el Norte de Santander por 72 horas, más tarde fue extendido indefinidamente, desde ese entonces más de mil colombianos han sido deportados y más de cinco mil han abandonado voluntariamente el país.
Vía EFE