La oficina de la Unidad Nacional de Gestión de Riesgo de Desastres (UNGRD), que trabaja en el puesto de mando unificado que el Gobierno colombiano mantiene en la frontera, informó que en los últimos diez días 1.097 personas han sido deportadas por Venezuela y otras 7.162 han abandonado el país.Suman en total 8.259 colombianos que ha salido del país.
El presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, prometió que su Gobierno trabajará “24 horas, siete días a la semana” para que el retorno de colombianos que salen de Venezuela por la crisis fronteriza “sea lo más grato posible”.
En Cúcuta, ciudad fronteriza con Venezuela, Santos indicó que trabajo del Gobierno se intensificará para vincular rápidamente a los más de 1.000 deportados por el vecino país a los programas de empleo y subsidio de alquiler.
“Nuestro propósito es acelerar que las personas que están en los albergues entren en el procedimiento para poder tener un empleo, subsidio de arrendamiento y rehacer sus vidas donde ellos lo consideren”, aseguró el presidente.
Sobre el flujo de colombianos que continúan atravesando la frontera, el mandatario dijo tener conocimiento de que al menos 50 personas llegaron a su país por el puesto migratorio terrestre de Paraguachón, en el departamento de La Guajira, y anunció que mañana varios funcionarios se desplazarán hasta allí para atenderles.
“Vamos a estar pendiente de cualquier compatriota que llegue a nuestro territorio para recibirlos como se merecen, con los brazos abiertos, con el corazón abierto”, declaró.
El presidente colombiano visitó varios de los albergues en los que permanecen cientos de colombianos que han cruzado las trochas desde Venezuela en los últimos diez días, desde que el presidente de ese venezolano, Nicolás Maduro, ordenó un cierre parcial.
Santos visitó también algunas gasolineras para comprobar que hay suficiente abastecimiento de combustible y agradeció a los cucuteños la solidaridad mostrada a las miles de personas que en los últimos han llegado a la ciudad.