La descripción vulgar en inglés del acto de copulación, «fuck», generalmente censurada en los medios de comunicación, aparece cada vez más en la conversación coloquial de las nuevas generaciones.
Pero un historiador encontró el uso más antiguo hallado hasta ahora, registrado hace más de 700 años en un documento judicial.
Paul Booth, investigador de la Universidad de Keele, Inglaterra, se topó con la palabrota cuando escudriñaba unos pergaminos legales que datan del 8 de diciembre de 1310.
Palabra multiuso
Actualmente, la palabra «fuck» tiene una connotación estrictamente sexual en inglés. Parecida al improperio mexicano «chingar» o al «follar» de los españoles que, igualmente, es maleable y puede adaptarse de varias formas.
Puede describir tanto el acto de copulación como ser usada como insulto, maldición, admiración, calificativo peyorativo o superlativo según la intención del interlocutor.
Hay varias teorías de cómo entró la palabra en el léxico inglés, la más tradicional siendo la traducción del alemán «fulcher» que traducía «soldado».
Sin embargo, la primera instancia de la palabra siendo utilizada claramente en su presente sentido contemporáneo, el de connotación sexual, fue escrita por el secretario de un juzgado del condado de Chester, en 1310, en el caso contra un reo que intentó, infructuosamente, de copular con una mujer.
El secretario identificó al acusado como Roger Fuckebythenavel, algo así como Roger Chingaporelombligo.
La curiosa palabra aparece tres veces en el documento legal.
Paul Booth no cree que se trate del apellido del pobre Roger ni tampoco de la broma de un escribano travieso.
«Porno venganza»
La interpretación del historiador es que Roger era un poco tonto y trató varias veces de copular, pero su inexperiencia lo hacía apuntar hacia el ombligo.
De acuerdo a Booth, parece que la denuncia la pudo haber hecho la mujer que fue objeto del fallido intento de copulación, en lo que podría también ser el primer ejemplo de «porno venganza».
El caso suena como una novia rechazada que acude a las instancias legales para denunciar la ineptitud sexual de Roger de tal manera que el secretario le impone el alias de «Chingaporelombligo».
Según los documentos de los Archivos Nacionales de Reino Unido, Roger Ruckebythenavele compareció en tres ocasiones ante el juzgado y cada vez fue registrado en la minuta con el mismo nombre, con ligeros cambios de ortografía.
El fallo contra el acusado fue de destierro y el mundo nunca supo más de Roger.
Sin embargo, su sobrenombre sigue siendo usado en prácticamente en todos los ámbitos sociales donde se habla inglés.
BBC Mundo