El presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, reiteró hoy que está dispuesto a reunirse con su homólogo venezolano, Nicolás Maduro, para tratar la crisis fronteriza abierta hace casi un mes, pese al cierre de más pasos entre ambos países ordenado el martes por las autoridades de Venezuela.
«Reitero que estoy dispuesto a reunirme con el presidente Maduro para que tomemos decisiones y soluciones concretas» para tener una frontera libre de contrabando y de bandas criminales, dijo el mandatario en una declaración en la Casa de Nariño, sede del Ejecutivo.
Si embargo, indicó que una reunión presidencial «requiere un mínimo de preparación para ser exitosa» y volvió a destacar que no quiere que un hipotético encuentro con Maduro sea «solo para hacernos una foto, darnos la mano y que todo siga igual».
El canciller argentino, Héctor Timerman, envió este martes una carta a la presidencia pro tempore de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur), actualmente ejercida por Uruguay, en la que propuso una reunión de jefes de Estado para el próximo lunes.
El organismo regional hizo consultas al respecto pero no hubo consenso para hacer la convocatoria.
En su declaración de hoy, el presidente colombiano agradeció la mediación que Ecuador y Uruguay están haciendo para encontrar una solución al problema que comenzó el pasado 19 de agosto con la orden de Maduro de cerrar el paso fronterizo entre Cúcuta (Colombia) y San Antonio y Ureña (Venezuela), medida que progresivamente ha extendido a otros pasos.
El pasado 7 de septiembre Maduro ordenó el cierre del paso fronterizo de Paraguachón, entre el departamento colombiano de La Guajira, y el estado venezolano de Zulia, y el martes por la noche declaró el estado de excepción en otros diez municipios fronterizos con Colombia, incluyendo tres de Apure, con el cierre del cruce limítrofe con Arauca.
Santos dijo además que hoy habló con el presidente de Ecuador, Rafael Correa, y le pidió que continúe con «sus esfuerzos (de mediación) porque todos queremos pasar pronto esta página».
El presidente subrayó que quiere mantener los cuatro ejes que ha seguido hasta ahora en la crisis con Venezuela: «firmeza, prudencia, diplomacia y diálogo», y destacó que no caerá en provocaciones.
Finalmente, hizo hincapié en que «no es ampliando los cierres (fronterizos) como se acerca la posibilidad de una solución a los temas que aquejan» a la frontera entre ambos países.
«Se requiere un diálogo respetuoso, franco y sincero, basado en hechos y realidades», concluyó. EFE