Elías Lugo, representante regional del Movimiento Al Socialismo (MAS), denunció que dirigentes de la tolda naranja, que laboraban en la Gobernación de Miranda, han sido víctimas de persecuciones políticas.
Aseguró Lugo que él y la trabajadora social, Josefina Alcalá, fueron despedidos de manera injustificada. “Hemos sido víctima de una persecución política porque no apoyamos a los candidatos a diputados de la Mesa de la Unidad Democrática”, declaró el dirigente político, al tiempo que aseguró que los agraviados se ampararon en la Inspectoría del Trabajo.
Reveló que el último pago recibido fue el pasado 25 de agosto, aun cuando el convenio firmado entre las partes vence el 31 de diciembre de 2015. “Tenemos tres contratos establecidos y esto obliga al patrono a incluirnos como personal fijo”, acotó.
Resteados…
Aprovechó Lugo para recalcar que el MAS continúa con sus candidatos a la Asamblea Nacional, Osvaldo Vásquez, Edgar Luna y Elena Rodríguez, por el circuito 6 y 7, respectivamente. Además, apoyan al ex Secretario General de Acción Democrática en Miranda, David Rodríguez, quien aspira ganar por el voto lista.
“Nosotros hemos denominado a la MUD como la Mesa de la Maldad, ya que se han dedicado a excluir a quienes dentro de la oposición pensamos diferente, pero con esta actitud emulan las acciones del oficialismo”, dijo el declarante.
En otro orden de ideas, Lugo refirió que el aspirante de la MUD por el circuito 6, Manuel García, “dice ser el abanderado de la Unidad cuando fue él quien en las pasadas elecciones rompió la alianza opositora en el municipio Tomás Lander”.
MIP – TUY / JCR