El cuerpo de Pablo Márquez fue hallado en un basuraro en Petare. La víctima de 37 años de edad salió de su casa a laborar como taxista, pues había decidido a jubilarse de la GNB; era sargento mayor.
“Él trabajaba de noche, era taxista de noche, acostumbraba a llegar en la mañana y no llegó. Se le empezó a llamar y nunca contestó el teléfono hasta que lo consiguieron en el basurero”, relataron allegados.
El cuerpo de Márquez presentaba cuatro impactos de bala; tres en el abdomen y otro en la cabeza.
Márquez dejó dos niños pequeños; su vehículo aún no ha sido hallado.
En otro caso, Carlos Alberto Álvarez, de 18 años de edad, murió de varios disparos en la calle El Progreso de Carapita.
Se conoció que salió de una fiesta a las 6 de la mañana y fue interceptado junto a otro amigo por personas desconocidas.
Fuente: GV