La disminución de la cooperación venezolana en Nicaragua en el primer semestre de 2015 «es palpable y tiene su origen en la baja del precio del petróleo», consideró el diputado Carlos Langrand, de la bancada opositora Alianza Partido Liberal Independiente.
En términos de préstamos en colaboración petrolera, Venezuela redujo un 26,9 % su cooperación en el primer semestre de 2015 respecto al mismo periodo del año pasado, según el Informe de Cooperación Oficial Externa del I semestre de 2015 del Banco Central de Nicaragua (BCN).
La cooperación de Venezuela con Nicaragua se cifró en 248,8 millones de dólares en el primer semestre de 2014, desglosados en préstamos en colaboración petrolera (236,4 millones de dólares) y en inversión extranjera directa (12,4 millones de dólares).
Mientras que en el primer semestre de 2015, los flujos de la cooperación venezolana fueron de 193,3 millones de dólares, de los cuales 172,8 millones correspondieron a préstamos de la empresa Petróleos de Venezuela (PDVSA) y 20,5 millones fueron en concepto de inversión extranjera directa, indica el BCN.
La entidad detalló que entre el 2008 y el primer semestre de 2015, Nicaragua recibió 4.251 millones de dólares de la cooperación venezolana.
Langrand sostuvo en declaraciones a Efe que la disminución de la cooperación impactaría principalmente en los negocios de la familia presidencial y en el flujo de circulante en el país centroamericano.
«Nosotros hemos dicho que se corre un grave riesgo porque la disminución podría significar que algunas de las empresas que han sido financiadas con fondos venezolanos podrían entrar en alguna ‘iliquidez’ que eventualmente podría convertirse en deuda pública», explicó.
Venezuela fue el primer cooperante de Nicaragua durante la primera mitad de este año, apunta la entidad financiera, seguido del Banco Centroamericano de Integración Económica (96,4 millones de dólares), el Banco Interamericano de Desarrollo (49,7 millones de dólares) y AIF/Banco Mundial (39,7 millones).
A las entidades financieras le siguen Holanda (38 millones), la Unión Europea (6,7 millones), la Corporación Interamericana de Inversiones (24,8 millones) y Alemania (18,2 millones).
Según el BCN, los préstamos de PDVSA, en el marco del acuerdo de cooperación petrolera, continúan derivándose de una política de créditos concesionales a 25 años de plazo, incluyendo dos años de gracia, y una tasa de interés del 2 % anual.
Dichos préstamos serán cancelados por el sector privado como resultado de las inversiones que este realiza en proyectos socio productivos, apuntó el BCN.
Indicó que de los 172,8 millones de dólares en préstamos de PDVSA del primer semestre de 2015, el 62 % fue destinado a proyectos socio productivos, destacándose el financiamiento a la soberanía energética, la industria, el desarrollo del comercio justo, la inversión financiera, el desarrollo empresarial, la producción agropecuaria y forestal, entre otros.
Los recursos restantes de los préstamos de PDVSA fueron asignados a proyectos sociales, como subsidios del transporte colectivo, soberanía y seguridad alimentaria y nutricional, infraestructura habitacional, inversión social, educación, cultura y recreación, salud, agua y saneamiento, entre otros.
La cooperación venezolana es canalizada a través de la empresa mixta petrolera Alba de Nicaragua S.A. (Albanisa), que se encarga de suministrar combustible.
Albanisa está integrada por PDV Caribe, filial de Petróleos de Venezuela S.A. (PDVSA), y la estatal Petróleos de Nicaragua (Petronic). EFE