Francisco Martínez, presidente de la Federación de Cámaras y Asociaciones de Comercio y Producción de Venezuela –Fedecámaras-, considera que la implementación de más controles de precios agudizará el desabastecimiento. “Las empresas seguirán cumpliendo con la ley pero se van a generar problemas que no permitirán la reposición de inventarios”.
En el Foro A Tiempo de Unión Radio, Cipriana Ramos, presidenta del Consejo Nacional del Comercio y los Servicios –Consecomercio-, advirtió que la escasez será la primera consecuencia de la modificación de la ley de precios justos. “Vamos a tener mucho menos mercancías en las calles porque nadie va a importar con dólar libre si no puede ajustarlo al precio de venta”, añadió.
Para Ramos, en las actuales condiciones establecer un precio máximo de venta al público es prácticamente imposible porque no existe oferta.
“Vas a tener un precio justo para los productos regulados y otro máximo para el resto de los productos. Quién va a importar a un tipo de cambio para vender a otro, evidentemente no vamos a tener mercancía. Lo que tenemos que ver es cómo hará el comercio para vender lo que ya tiene”.
Martínez recomienda al ejecutivo modificar el régimen cambiario y establecer un sistema fluido para la planificación de las compras de materias primas, insumos y repuestos para producir bienes y servicios hechos en Venezuela y no importaciones.
Para Martínez, el otro gran obstáculo es el control de precios. “Mientras no tengamos un sistema de conformación de precios que entienda los complejos procesos de encadenamientos productivos, no vamos a tener empresas con rentabilidad y por ende tampoco se van a poder pagar salarios mínimos”.
Para finalizar, la titular de Consecomercio alertó que la insuficiencia de los sueldos pese a los aumentos decretados, aumentará la desprofesionalización en el país. “Se está yendo el personal para el exterior o deja de trabajar porque la economía informal les da mejores dividendos. Estamos perdiendo personas necesarias para poder producir”.