El Ministerio Público acusó al colombiano Omar Ortega Salazar (42) y a Jhonny Torres Carrillo (20), por su presunta vinculación con el funcionamiento de un laboratorio clandestino destinado a la elaboración de drogas, detectado el 4 de septiembre de este año en el sector Caño Negro del municipio Jesús María Semprún, estado Zulia.
Los fiscales 77° nacional auxiliar y 16° de esa jurisdicción, Mario Molero y Robert Martínez, respectivamente, acusaron a los dos hombres por presuntamente incurrir en los delitos de tráfico ilícito, fabricación y producción ilícita de sustancias estupefacientes y psicotrópicas, porte ilícito de armas, asociación para delinquir y resistencia a la autoridad.
En el escrito presentado por los representantes del Ministerio Público ante el Tribunal 3º de Control del estado Zulia, se solicitó la admisión de la acusación, el enjuiciamiento de los hombres y que se mantenga la privación de libertad para Ortega Salazar y Torres Carrillo en la sede del Retén de San Carlos, ubicado en el municipio Colón de esa jurisdicción.
Adicionalmente, los fiscales ratificaron la solicitud de bloqueo e inmovilización de cuentas de los acusados, así como la prohibición de enajenar y gravar bienes, la cual fue acordada por la mencionada instancia judicial.
De acuerdo con la investigación, el citado día, efectivos del Ejército realizaban labores de patrullaje por el mencionado sector del municipio Jesús María Semprún, cuando fueron atacados por varios hombres armados.
De inmediato, la comisión de militares se desplegó en la zona y hallaron una estructura de madera en la cual fueron incautados 50 kilos de cocaína, tres mil litros de acetona, mil 800 litros de alcohol, 250 kilos de cloruro de calcio, 10 kilos de pólvora, ocho microondas, una lavadora, una secadora, dos compresores, dos prensas de acero y varias calderas de acero inoxidable.
Ante tal situación, Torres Carrillo y Ortega Salazar fueron aprehendidos en el lugar y puestos a la orden del Ministerio Público.