Luis Manuel Magallanes (38) y Marbelys del Carmen Márquez (23) se debaten entre la vida y la muerte después que sufrieron quemaduras de tercer grado en 90% de sus cuerpos
“Nos estamos quemando sáquennos de aquí”, gritaban con desespero la pareja conformada por Luis Manuel Magallanes de 38 años y Marbelys del Carmen Márquez, de 23, quienes se debaten entre la vida y la muerte después que sufrieron quemaduras de tercer grado en 90% de sus cuerpos.
Ambos fueron víctimas de un incendio provocado poco antes de las 12:00 am del viernes, presuntamente, por el primo de Marbelys, (César Márquez) quien le habría prendido fuego a la pieza en la que vive la pareja en la finca Bajo Grande, ubicada en el sector La Aventazón II, vía El Caris de El Tigre, sur de Anzoátegui.
Los aterradores gritos de la pareja alertaron a Rubén Herrera, propietario de la finca, quien se hallaba en la casa que queda al lado del anexo.
“Escuché los gritos y cuando salí lo que había era candela. Con ayuda de los vecinos, tratamos de abrir la puerta, pero tenía candado por dentro. Por más que tratamos de romperla no pudimos”.
Herrera señaló que tuvieron que tumbar unos bloques de la pared posterior donde quedaba una pequeña ventana para poder sacarlos. “Luis Manuel me dijo que si se moría, el responsable era César, que fue quién los quemó”, dijo el dueño de la finca al precisar que el agresor tuvo que haber lanzado gasolina por la ventana del frente, justo donde estaba la cama.
Indicó que llamó a Protección Civil El Tigre, quienes llegaron lo más rápido posible y pudieron trasladar a la pareja al hospital Guevara Rojas. Pero debido a la gravedad de las quemaduras fueron referidos a las 3:00 am al Luis Razetti de Barcelona.
Desconcierto…
Para los familiares de Márquez esta es la tragedia más terrible que alguien pueda sufrir.
Héctor Marquez contó que César vivía con ellos, en el balneario Yannelys en El Caris, a pocos metros de donde residen.
“El viernes en la tarde, César tuvo una discusión con Luis Manuel y este le dio un golpe en la cara que le dejó un ojo hinchado. Eso tenía molesto a César, pero no pensamos que haría algo así”.
Alegó que a las 9:00 pm se acostaron y su sobrino se quedó en el patio. No fue sino en la madrugada cuando funcionarios policiales le avisaron de lo que había ocurrido. Del paradero del implicado no se sabe nada. Mientras que sus víctimas siguen luchando por vivir.
Vía El Tiempo