La policía científica prosigue las investigaciones bajo la coordinación de la Fiscalía General, por el homicidio de Anthony José Laya Rada (27), taxista y comerciante del estado Vargas, y la apropiación por parte de funcionarios policiales de un alijo de 56 kilos y medio de cocaína que presuntamente se encontraba en poder del fallecido.
Laya Rada desapareció el sábado 31 de octubre. Tras varios días de búsqueda sus familiares lo encontraron el jueves 5 de noviembre en la morgue de Bello Monte, lo retiraron el sábado y lo llevaron directamente al cementerio, sin velatorio previo. Las autoridades estiman que lo mataron el domingo 1 de noviembre.
En La Guaira se desempeñaba como taxista, con un carro Toyota corolla, modelo pantallita, color gris, y además poseía un puesto de comida rápida en el Caribe. Se había mudado de La Guaira (El Guamacho) y vivía en Caraballeda.
Sus captores se lo llevaron hasta la población de Araira, estado Miranda, donde le dieron muerte y lo abandonaron en Guarenas, junto con su carro. Tenía disparos en la frente, boca y pecho.
La investigación alcanza a un grupo de funcionarios del Cicpc que actuaron en el secuestro y muerte de Laya Rada, y a otro grupo que realizó procedimientos irregulares para adueñarse de la droga.
Funcionarios de Hurtos habrían actuado en el secuestro y otro grupo procedente de la subdelegación de Vargas en el trasladado el carro de Anthony hasta La Guaira, donde lo desvalijaron.
La Fiscalía anunció la presentación en tribunales del comisario Alirio Castellanos, del Cicpc de Vargas y la incautación de 49 panelas del alcaloide. En esa dependencia concentran las investigaciones, donde varios detectives se ausentaron de sus funciones.