La Sociedad interamericana de Prensa (SIP) aplaudió hoy la decisión de la CIDH de otorgar medidas cautelares a cuatro periodistas venezolanos, aunque dio por seguro que el Gobierno venezolano no las acatara.
«Si bien nos satisface la decisión de la CIDH de otorgar las medidas cautelares, nos desalienta saber que el Gobierno de Venezuela no las cumplirá, como tampoco lo ha hecho con otras decisiones del sistema interamericano», dijo en un comunicado el presidente de la Comisión de Libertad de Prensa e Información de la SIP, el uruguayo Claudio Paolillo.
Así ocurrió, precisó Paolillo, con el último fallo de la Corte Interamericana para que el Gobierno «permita reabrir RCTV y le devuelva sus activos».
La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) dictó las medidas para Miguel Henrique Otero, Teodoro Petkoff, Alberto Federico Ravell e Isabel Cristina Ravell, debido a los «graves actos de hostigamiento y persecución del Gobierno venezolano por ejercer su derecho a la libertad de expresión».
La CIDH consideró que los solicitantes de las medidas cautelares «se encuentran en una situación de gravedad y urgencia» y pidió a Venezuela que adopte las medidas necesarias «para garantizar el ejercicio legítimo de la libertad de expresión de estos periodistas y «evitar que se repitan los hechos» que originaron la petición.
La SIP señaló hoy que en este caso, las medidas fueron solicitadas «para evitar daños irreparables a los derechos humanos, la libertad de expresión y la integridad personal», consagrados en los artículos IV y I, respectivamente, de la Declaración Americana de los Derechos y Deberes del Hombre.
Miguel Henrique Otero, presidente-editor de El Nacional, Teodoro Petkoff, de Tal Cual, y Alberto Federico Ravell, del sitio web La Patilla, «han venido padeciendo por parte de altos funcionarios estatales reiteradas declaraciones estigmatizantes, actos de seguimiento y vigilancia», así como «procesos penales y civiles por difamación y prohibición de salida del país», dijo la SIP.
Se trata de «métodos de hostigamiento» que buscan «coartar a esos medios para que dejen de publicar información que pudiera ser incómoda para el Gobierno» venezolano, expresó Paolillo. EFE