El director de la Policía Municipal de Plaza, oficial Richard Urbano aclaró durante la mañana de ayer, en encuentro con representantes de medios, que los hechos que se produjeron a las afueras del establecimiento Paga Poco, en el centro de Guarenas, durante el pasado miércoles 18 de noviembre, no tuvieron nada que ver con saqueos en la ciudad, y describió la situación como un conato violento que fue resuelto casi de inmediato en el sitio.
Tras conocer las versiones surgidas acerca de que personas habrían cargado con 300 kilos de azúcar tras un incidente ocurrido a las afueras del establecimiento comercial Paga Poco, Urbano indicó que se formó una riña en el escenario, producto de que presuntos «bachaqueros» que al parecer habían comprado en varias ocasiones, y a raíz de ello dos personas resultaron detenidas, un adulto y un adolescente, quienes fueron puestos a la orden del Ministerio Público (fiscalía IV a cargo del doctor Jaime Muñoz).
Urbano igualmente destacó que una funcionaria de policía resultó herida (con dos puntos de sutura en su mano derecha), y adicionalmente aclaró que algunos paquetes de azúcar quedaron esparcidos en el sitio, a raíz de que se rompieron en medio de la riña.
El director de Poliplaza fue enfático al señalar que por parte de este organismo, por instrucciones del alcalde Rodolfo Sanz, se hace supervisión diaria en sitios donde se forman colas cuando hay venta de productos regulados. En este caso están interviniendo siempre funcionarios de la Oficina de Supervisión de la Actividad Económica; y a raíz de ello incluso se han hecho ventas supervisadas y se atienden denuncias de todas las personas que presuntamente hacen compras para aplicar posible «bachaqueo».
En el hecho suscitado en Guarenas el pasado miércoles estuvieron presentes comisiones de la GNB, además del personal de Poliplaza.
JS
