El mánager de Bravos de Margarita, el guarenero Henry Blanco, dice que tiene mucha confianza en los jugadores que tiene a su disposición para llegar a la postemporada
Alexander Mendoza
LVBP
Bravos de Margarita superó una difícil primera mitad de campaña, en la que apenas ganó nueve encuentros y terminó último, para luego resurgir de sus cenizas y elevar su rendimiento en la segunda mitad de la eliminatoria.
Con ocho encuentros por jugar, el conjunto insular marcha a medio juego del puntero Magallanes, con posibilidad de terminar en la cima de la clasificación, lo que le otorgaría los puntos necesarios para acceder a los playoffs.
Solo que el manager Henry Blanco tendrá que lidiar con las ausencias del novato José Osuna, el slugger Eliezer Alfonzo y campocorto Edgar Durán, que encaran suspensiones por seis, cuatro y tres juegos, respectivamente, por su participación en la trifulca contra Magallanes, el sábado de la semana pasada. Los tres han sido clave en la alineación del club.
“Vamos a seguir preparándonos de la misma forma. Hemos demostrado que somos un equipo que puede jugar como cualquier otro en la liga”, señaló Blanco, en el miércoles, antes del encuentro frente a Leones del Caracas, en el Estadio Universitario. “Lo más importante es que los muchachos sepan en la situación en que estamos y que debemos jugar sin presión, seguir con el mismo desempeño que logramos alcanzar hace un mes atrás”.
Desde que el exreceptor tomó las riendas del equipo, luego de concluir sus compromisos con los Cachorros de Chicago, Margarita exhibe récord de 21-18, incluida una racha de 10 triunfos, en noviembre, que significó un récord para la franquicia.
Pero antes de iniciar esta noche una gira de cuatro encuentros, entre Maracaibo y Barquisimeto, los Bravos apenas ha ganado uno de sus últimos cuatro desafíos y el fin de semana podrían quedarse sin tres de sus figuras más importantes a la ofensiva, si el Comité de Apelaciones de la LVBP ratifica las sanciones impuestas el martes.
Alfonzo, Osuna y Durán se combinan para 17 cuadrangulares y 74 impulsadas, cifras que representan el 52% y el 37% del total del conjunto en esos departamentos. No será fácil perderlos justo en la recta final de la eliminatoria.
“Tengo que manejar esa situación de la mejor manera posible. Son cosas que pasan en el beisbol y, lamentablemente, nos tocó a nosotros. Pero tenemos buen material, dispuesto a suplir las ausencias”, destacó Blanco. “Haremos lo mismo que nos ha dado resultado desde hace un mes. Confío en los 30 peloteros que tengo en el róster. Todos han demostrado que pueden hacer el trabajo y están dispuestos a dar el próximo paso, que es acceder a los playoffs”.
El abridor Omar Bencomo Jr., suspendido por tres desafíos, y el relevista Luis Ramírez, por un lapso de dos juegos, comenzaron a cumplir sus sanciones por involucrase en la reyerta, a partir del miércoles. Bencomo ha sido lo más parecido a un as del equipo (3-3, 2.97 PCL, en 11 inicios) y Ramírez es uno de los taponeros más consistentes del circuito en el último lustro. Ambos fueron sustituidos en el róster activo por los pitchers Kender Villegas y Frank Rivas.
“Material tenemos y lo usaré. ¿Cómo haré la alineación? No lo sé todavía”, puntualizó el estratega. “Vamos a mover los abridores un día, aunque no he decidido quién reemplazará a Bencomo. En este instante lo más importante es ir día a día”, enfatizó Blanco, que tratará de mantener el ánimo en la cueva.
“La motivación, la confianza que se le dio a los muchachos, que obviamente no la tenían al principio, cambió todo. Eso hay que mantenerlo. Lograron pasar la página de la primera mitad a tiempo. En eso tenemos que enfocarnos”.