Internet es como un huracán. Arrasa todo. Por donde pasan sus redes. Los negocios que se resisten, están condenados, tal vez no a morir, pero sí a sufrir penurias. Estamos, hay que reconocerlo, en una segunda revolución industrial que afecta, claro está, a negocios tan prósperos como las operadoras de telefonía.
Ante lo que consideran desleal, ya hay regiones como Brasil y, ahora, Marruecos que se han dispuesto a poner freno a la popularización de las aplicaciones de mensajería instantánea que ofrecen llamadas VoIP, es decir, utilizar las conexiones para transferir conversaciones de voz. Y lo hacen de manera gratuita. WhatsApp, por ser la herramienta más utilizada del mundo (900 millones de usuarios) es quien personaliza esta cruzada. ¿Se extenderá esta corriente?
Se hizo en Brasil a propuesta de un juez local, aunque el bloqueo duró únicamente unas horas. Los principales operadores de telefonía de Marruecos han ido un paso más allá bloqueando las aplicaciones que permiten las llamadas por internet, como WhatsApp, Viber o Skype o Facebook. En concreto, Maroc Telecom, Meditel y Inwi han decidido poner freno a las llamadas VoIP sin previo aviso, según denuncian medios locales a través de internet. El bloguero Hicham Zerhouni ha descrito este proceso como un «paso atrás» e «irracional».
El regulador de las telecomunicaciones marroquí (ANRT) señaló el pasado jueves a través de un comunicado (PDF, en francés) que ninguno de los productos que ofrecen este tipo de llamadas gratuitas cuentan con las licencias necesarias para poder operar en el país. «Además de las pérdidas para el mercado nacional de las telecomunicaciones, las llamadas de voz gratuitas por internet no tiene acceso legal», dijeron fuentes de la institución.
Según destacó, el establecimiento y explotación de redes públicas de telecomunicaciones y la prestación de servicios de telefonía están sujetos al sistema licencias previstas en el artículo 2 de la Ley 24-96 vigente en el país vecino, en donde se estiman que hay unos 10 millones de usuarios con perfiles en Skype, WhatsApp y Viber.
Las decisiones de bloquear este tipo de «apps» han afectado a otros países como Irán, Bangladesh, Guinea Ecuatorial, Egipto o Burundi, con razones distintas. En el caso de Irán, por ejemplo, el gobierno tildó a WhatsApp de un servicio a manos del «gobierno americano», mientras que otros países africanos se hizo lo propio por las restricciones impuestas por sus mandatarios. Incluso en Inglaterra, una de las grandes potencias mundiales, se barajó la posibilidad de evitar el acceso a WhatsApp a raíz de los atentados yihadistas sufridos en París. La propuesta, según trascendió en su momento, venía para mejorar la seguridad de sus conciudadanos