Los ministros de Exteriores de Argentina, Susana Malcorra, y de España, José Manuel García-Margallo, expresaron su «preocupación» por la situación en Venezuela y apostaron por una solución basada en el diálogo y el consenso para superar la crisis.
En una rueda de prensa conjunta tras reunirse en Madrid, ambos dejaron claro que los «principios y valores» de Argentina y España presidirán su relación con Venezuela.
El jefe de la diplomacia española recordó que el pasado viernes convocó al embajador de Venezuela en España, Mario Isea, para expresar su rechazo por las palabras de Nicolás Maduro en las que calificó al jefe del Gobierno español, Mariano Rajoy, de «intervencionista, racista y colonialista».
Asimismo, le pidió explicaciones por un viaje de políticos españoles de izquierda a finales de 2014 a Caracas en un avión oficial venezolano para participar en un congreso.
En este sentido, el ministro español reiteró que para España el viaje y las palabras de Maduro suponen una injerencia absoluta y deseó para Venezuela lo mismo que para España: derechos humanos, democracia y prosperidad económica.
Recordó los lazos «históricos» con Venezuela, donde hay más de 200.000 españoles, y mostró su confianza en que se pueda avanzar en un diálogo encaminado a favorecer la «reconciliación nacional».
Por su parte, Malcorra dijo que «todo lo que pase en Venezuela lo seguimos muy de cerca» y que cualquier cosa que desestabilice este país tendrá un impacto también desestabilizador en toda la región.
El gobierno de Mauricio Macri, que asumió el 10 de diciembre pasado, quiere mantener relaciones con todos bajo los principios de democracia, libertad y derechos humanos, indicó. EFE
