El equipo nacional no mostró mucho en conjunto ante Costa Rica, aunque sí algunas individualidades
Nada especial en el triunfo de la Vinotinto sobre el combinado de Costa Rica, logrado antenoche en Barinas, minutos después que, en Buenos Aires, el Caracas cayera por el mismo marcador, 1-0, en partido frente al argentino Huracán abriendo la Copa Libertadores.
Fue el balance del despegue internacional de 2016, que en el caso del equipo nacional marcaba la presentación de jugadores del circuito venezolano con el agregado del defensa Mikel Villanueva y el delantero Andrés Ponce, que juegan en Europa.
Como colectivo, los venezolanos mostraron poco. Afectó, desde luego, que apenas tuvieron dos días de preparación, así como la expulsión de dos jugadores centroamericanos -uno poco antes de concluir la primera parte-, que condicionó el objetivo de ambos técnicos en el partido preparatorio.
Dejó poco el aspecto de conjunto. Eso sí, aun con superioridad numérica los criollos anduvieron carentes de agresividad, con excesivos pases horizontales, indecisos ante la posibilidad de avanzar en bloque o meter pases en profundidad, abusando de pelotazos sin fortuna ante una defensa firme.
En lo individual se buscaba probar jugadores, por la necesidad de renovar y de contar con piezas ante la duda sobre la incorporación de todos los «caballos» para los partidos de la eliminatoria mundialista. Lucieron «Cariaco» González y Yefferson Soteldo por su habilidad con la pelota, desequilibrantes, mientras cumplían especialmente los volantes Flores y Figuera, así como los defensas Benitez y Angel, este autor del gol. Villanueva dejó dudas en la banda izquierda y Ponce no pudo ser evaluado pues apenas ingresó en la segunda parte, cuando se jugaba «ataque contra defensa» ante el repliegue tico.
Armando Naranjo
donarmandonaranjo@gmail.com
@DonArmandoN