Warren Richardson tomó la foto de un migrante el 28 de agosto cerca del paso fronterizo de Roszke, en Hungría
Un fotógrafo independiente australiano ganó el jueves el prestigioso premio World Press Photo de 2015 por una dramática imagen captada a la luz de la luna de dos migrantes pasando un bebé bajo la cerca de alambre de cuchillas en la frontera entre Hungría y Serbia.
Warren Richardson tomó la foto el 28 de agosto cerca del paso fronterizo de Roszke, en Hungría, donde los migrantes trataban de entrar en Europa antes de que las autoridades húngaras pudieran terminar la cerca a lo largo de su frontera con Serbia.
«Si hubiera usado flash había delatado su posición a la policía húngara», dijo Richardson, quien acampó durante varios días en la frontera para documentar el paso de los migrantes.
Debido a la necesidad de ahorrar batería, Richardson solo vio la foto cuando regresó a Budapest para editar su trabajo.
La imagen es «increíblemente potente visualmente, pero también muy matizada», dijo Vaughn Wallace, subeditor de fotografía de Al Jazeera America y miembro del jurado.
La fotografía «le hace a uno detenerse y pensar en el rostro del hombre, pensar en el niño. Ve la dureza del alambre de espino y las manos extendidas en la oscuridad», añadió.
En el concurso participaron 82.951 imágenes tomadas por 5.775 fotógrafos.
La competencia del año pasado se vio alterada por la descalificación de un ganador quien reconoció que una de una serie tomada en la ciudad belga de Charleroi en realidad fue tomada en Bruselas y por la polémica en torno a las imágenes de la ciudad postindustrial.
Lars Boering, director gerente de la Fundación World Press Photo, dijo que se a elaborado un nuevo código de ética y elogió a los fotógrafos por atenerse a él en gran medida.
AP