El Leicester no pudo pasar este martes del empate en casa frente al West Brom (2-2) y se dejó dos puntos que le hubieran permitido ampliar su diferencia con el segundo clasificado, el Tottenham, que podría arrebatarle el liderato si gana el miércoles en Boleyn Ground al West Ham.
Los hombres de Claudio Ranieri, que llegaban al duelo ante los ‘Baggies’ después de derrotar con mucho sufrimiento el pasado sábado al Norwich (1-0, gol del argentino Leo Ulloa), merecieron más ante el siempre aguerrido West Brom de Tony Pulis.
El partido se le comenzó a complicar al líder a los once minutos de juego, después de que el venezolano Salomón Rondón recibiera un balón largo, le ganara el cuerpo a cuerpo al gigante Robert Huth y definiera muy bien ante la salida de Kasper Schmeichel, que llegó a tocar el balón pero no pudo evitar que se colara en la meta.
Reaccionó el Leicester, que a la media hora consiguió igualar la contienda gracias a un afortunado disparo del centrocampista Danny Drinkwater.
