Los manifestantes, que fueron rodeados por un gran dispositivo policial, solicitaron la renuncia de la primera ministra Angela Merkel
Cerca de 3.000 ultraderechistas se manifestaron este sábado en las cercanías de la Cancillería en Berlín para exigir la salida de Angela Merkel y «liberar» así a Alemania de la que denominaron «invasión» de refugiados e inmigrantes.
«Merkel debe irse» y «Nosotros somos el pueblo» fueron los lemas más coreados durante su marcha en dirección a la emblemática Puerta de Brandeburgo, rodeados por un gran dispositivo policial para evitar enfrentamientos con otras dos marchas convocadas por fuerzas de izquierdas bajo el lema «Nazis fuera», reseñó Efe.
Con banderas alemanas y muchos ocultos bajo capuchas y bufandas, los manifestantes, autodenominados «patriotas», tacharon de «traidor» al Gobierno de Merkel y reclamaron el fin de la política de asilo y refugio y de la «islamización» del país.
Frente a ellos, separados por vallas colocadas por las fuerzas de seguridad, cientos de personas con banderas arcoiris y pancartas «contra la estupidez y la xenofobia» intentaron acallar los eslóganes ultraderechistas con pitos y canciones.