Estamos pagando los desvaríos de una cuerda de hombres egoístas y egocéntricos, que no fueron más allá de sus propios pensamientos e intereses
¿Sueños de libertad? Desde hace tanto que nos persigue esa frase y son innumerables las cruzadas que hemos tenido que enfrentar los venezolanos por la tan preciada libertad.
Hace cientos de años luchamos contra los españoles por nuestra independencia y hoy lo hacemos contra nuestra propia gente, venezolanos que creyeron que regalando nuestro país en pedacitos, nos regalarían la libertad que tanto hemos anhelado.
Lo cierto es que hoy somos más dependientes que nunca. Dependemos del mundo para poder vivir. ¿Qué diría Bolívar de su sueño independentista y de la realidad que hoy vivimos en esta «patria bonita»? Lejos de verse reivindicado su sueño, estamos pagando los desvaríos de una cuerda de hombres egoístas y egocéntricos, que no fueron más allá de sus propios pensamientos e intereses.
Hemos luchado. Otras veces hemos esperado. Algunos han calentado la calle, sin ser su momento. Otros han llamado a la calma esperando que llegara la hora. Hoy, el tiempo se cumplió. Llegó la hora de actuar y de construir juntos la ruta para el cambio.
Llegó el tiempo constitucional para revocar a Nicolás Maduro y a su combo de ladrones.
Este gobierno se ha encargado de ratificar que no quiere cambiar, y ya esto lo hemos hablado antes, si el gobierno no cambia los venezolanos tenemos derecho a cambiarlo. No podemos esperar a que llegue un mesías para tener el país que queremos.
Venezuela necesita del concurso y del consenso de todos. La democracia es alternabilidad, el poder es un préstamo que da el pueblo y tiene fecha de vencimiento. Hoy le decimos a Venezuela que este gobierno caducó.
El camino para el cambio se está construyendo y dependemos de todos los venezolanos.
Porque oficialistas u opositores, todos sabemos que esto ya no da para más. No vemos acciones para combatir la escasez, inflación y el problema de la violencia desbordada en el país y frente a esto, los venezolanos debemos cambiar.
Venezuela tiene todo para salir de esta situación de crisis. Hoy más que nunca tenemos que rescatar el valor y la cultura del trabajo porque con esfuerzo ganaremos las cosas.
La apuesta está sobre la mesa. ¡Revocatorio ya! El revocatorio depende de nosotros, del pueblo. De la gente que está cansada de tanta miseria y abandono.
Se requieren 3 millones 899 mil firmas para convocar a referendo. Parece unaa cifra elevada pero estamos seguros que podemos con eso y más. Sabemos que si nos organizamos las conseguimos en un solo día.
Si hablamos de los votos para sacarlo de Miraflores, pues los votos están, los obtuvimos el pasado 6 de diciembre. El pueblo habló con contundencia en las elecciones parlamentarias.
Hoy lo que tenemos que hacer es terminar de convencer a quienes se encuentran aún un poco desorientados.
Aglutinar todo ese descontento y hacerlo masa.
La fuerza del cambio tiene años recorriendo el país y cada día coloniza nuevos espacios, no permitamos que esto se detenga. No dejemos que esta gente que no quiere a Venezuela se atornille en la presidencia y en el poder.
Seamos ejemplo para el mundo y sigamos la corriente del cambio que se ha visto en recientemente en América Latina.
Ya hemos vivido esta experiencia, tal vez si hubiesemos tomado una mejor decisión como país en aquel entonces, no estuviéramos atravensado por esta crisis hoy.
Pero la realidad es otra, todo el mundo en la calle habla del referendo revocatorio.
No dejemos que esas voces se callen porque eso lo que quiere decir es que, el pueblo convocará y revocará a Maduro este año.
Y seguiremos construyendo el país libre e independiente que soñamos y todos merecemos. ¡Sigamos adelante, nada nos detiene!