Los trabajadores informales se quejaron de pocas ventas durante las celebraciones religiosas, mientras el común de las personas pedía paz para el país
Fueron numerosos los vendedores de velas, sahumerio, ropa morada, entre otros, apostados cerca de las iglesias durante esta Semana Santa, como es usual. Pero las cosas no salieron de acuerdo a lo esperado.
Expresiones como “en comparación del año pasado, la cosa no estuvo muy bien” fueron repetitivas entre los comerciantes de la economía informal ubicados alrededor de la Basílica de Santa Teres.
Daysi Araque vende velas y sahumerio y piensa que el año pasado las ventas fueron mejores.
“La verdad que todo es una cadena, nosotros lo compramos caro y al revenderlo por supuesto sube el costo.
Es que hoy compras en un precio y mañana en otro. Todo nos subió a un 800 por ciento”, comentó Araque.
Un vestido de nazareno el año pasado costaba 400 el más pequeño, ahora osciló entre los dos o tres mil bolívares.
Iria Salazar, también vendedora, declaró que no consiguió la tela y el precio se incrementó en un 300 %. “Para mí es forzoso conseguirla, todo esto lo hago por supuesto porque necesito trabajar y porque creo que ya para mí es una costumbre, es una manera ganarme el dinero en estos días”, declaró.
Vicente Escobar, vendedor, dijo que su opinión era igual como la de sus compañeros. Confiesa tener mucho tiempo vendiendo en el mismo lugar.
“Las cosas cambiaron, tengo toda mi familia aquí conmigo colaborando, a veces tengo que bajarle el precio a los vestidos, las velas costaban 20 bolívares, pero ahora cuestan 100. Dígame usted cómo le hacemos ahora”, se quejó.
Mucha devoción
Dentro de la iglesia muchas personas rezaban, todas con diferentes peticiones. Para Carmen Benavides , fue una semana para acudir al templo con toda la familia. “Quiero paz, pido paz, para nosotros, es una semana sagrada”, expresó.
Ramón Carreño se declaró devoto de Dios y de la conciliación. “Siempre visito la iglesia, es un lugar de paz y tranquilidad, en semana santa voy a la iglesia con toda mi familia, juntos como siempre”.
“Los venezolanos queremos paz, vamos a reflexionar, Dios nos dio sabiduría, entonces vamos a usarlo para aprender a ser tolerantes, mejores personas; la situación del país no es buena y solo los humanos lo podemos resolver, busquemos más a Dios porque él es amor”, comentó Esperanza Castro.
Carla Ustáriz A.
Fotos Giovanni Martínez