Mientras prestan apoyo a los bomberos para las labores de refrescamiento de la montaña, igual prestan servicio a las comunidades y hasta abasteces a individuales que se acercan al llenadero
Debido a la sequía e incendios que se registraron en el Waraira Repano en las últimas semanas, los trabajadores de camiones cisternas que laboran en el llenadero ubicado en la Cota Mil, a la altura de Sebucán, se han volcado a contribuir con el riego del vital líquido en las faldas de la montaña, tarea que comparten con la atención a las comunidades.
Son alrededor de 50 socios quienes trabajan en la Cota Mil, que tienen más de sesenta camiones cisternas que surten a los municipio capitalinos, en especial Sucre y Chacao. Al menos dos veces al día, estos trabajadores apoyan a los Bomberos para apagar los diferentes incendios que se presentan en el la montaña, según lo aseguró el Vicepresidente de la Asociación 4 Polos, Norberto Sayago. “A veces tenemos que estar en el lugar desde muy temprano, porque no solo contribuimos para que el Waraira Repano no se incendie, coordinando operativos con las autoridades pertinentes, sino que estamos pendientes de las comunidades”.
Según explicó Sayago, Terrazas del Ávila y la Urbanización Miranda son las comunidades que más demandan sus servicios.
Cabe acotar que en algunas oportunidades han contribuido con camiones cisternas a varias comunidades de Petare de forma gratuita. “Preferimos ayudarlos algunas veces con el servicio para que no cierren las vías con una protesta. Ellos también padecen la falta del vital líquido y entre su desesperación una vez nos amenazaron, nosotros no tenemos la culpa”, aseveró Savago.
Cada cisterna puede hacer al día hasta tres viajes , todo depende de la velocidad con que el agua llegue a la bomba. “Tenemos mucho trabajo, entendemos que hay familias que les urge el agua, y no sabemos qué tipo de necesidad tienen, pero a veces deben ser pacientes, porque esto amerita un proceso de llenado y traslado complejo”, explicó.
Los trabajadores manifestaron que seguirán apoyando a los bomberos. “En lo que podamos contribuiremos con el riegue de agua en el Ávila, porque no queremos más incendios”, finalizó Sayago.
Carla Ustáriz A. / carlajacquelineu@gmail.com