La Alcaldía de Baruta, a través de la Dirección de Desarrollo Social, informó que el Programa de Nutrición de Baruta adjudica todos días 1710 meriendas escolares a los estudiantes de cinco escuelas municipales del municipio y la Casa Cuna.
“En estos momentos de gran crisis hemos hecho un esfuerzo enorme para continuar con este programa. Con una gran dedicación y compromiso diariamente preparamos y llevamos 1710 meriendas a niños de las escuelas Bárbaro Rivas, Manuelita Sanz, Aquiles Nazoa, preescolar El Carmen y Miguel Otero Silva asi como la Casa Cuna”, indicó Maeca López Méndez, directora de Desarrollo Social de la Alcaldía de Baruta.
Desde arepas y pastelitos rellenos hasta ensaladas y carnes componen el menú escolar de los estudiantes beneficiados, el cual es creado por los médicos nutricionistas de la alcaldía.
“La entrega de las meriendas requieren de una gran logística. La dirección de Servicios Generales es nuestra gran aliada para llevar 120 cavas pequeñas, 60 en la mañana y 60 en la tarde, a los niños”, comentó la dirigente social.
Un kilo de harina, un kilo de amor
López Méndez agregó que los voceros de las direcciones de Desarrollo Social y Educación participan en algunas asambleas de padres y representantes de los infantes para exhortar a las comunidades educativas, en vista de la circunstancia actual, a que colaboren de forma voluntaria con un empaque de harina de maíz precocida o de trigo por mes y así no detener la preparación de las arepas y pastelitos horneados.
Tal colaboración es llamada por la dirección de Desarrollo Social “Un kilo de amor y un kilo de sonrisa”.
«En el caso de las verduras, carnes y aliños se compran en los mercados municipales y ferias de hortalizas. No hemos dejado en todos estos meses de mandar la merienda, contamos con el apoyo incondicional de la gestión de Gerardo Blyde”, explicó López Méndez.
«Queremos dar las gracias a la concientización de responsabilidades que hemos tenido de nuestros padres y representantes, quienes han entendido que ese kilo mensual de harina se traduce como un acto de amor y sonrisa en pro de los niños, que muchas veces es el único alimento que reciben durante el día”, concluyó así la directora de Desarrollo Social de Baruta.