Con esta iniciativa «quedaría explícito el matrimonio igualitario en nuestra nación como lo ha determinado la Suprema Corte de Justicia», dijo el mandatario, quien consideró indebido que las parejas gay tengan derechos en algunos estados y en otros no
El presidente de México, Enrique Peña Nieto, anunció este martes que enviará al Congreso una reforma constitucional para la legalización del matrimonio gay en todo el país.
«Habré de firmar una iniciativa de reforma al artículo 4° constitucional para incorporar con toda claridad el criterio de la Suprema Corte de Justicia de la Nación de reconocer como un derecho humano que las personas puedan contraer matrimonio sin discriminación», dijo Peña Nieto en un encuentro con organizaciones defensoras de los derechos de las personas homosexuales.
La Ciudad de México fue la primera jurisdicción en América Latina en contar con uniones legales de personas del mismo sexo tras aprobar en 2007 la llamada «sociedad de convivencia» y en 2009 el matrimonio.
Otros tres estados, Coahuila (norte), Nayarit y Quintana Roo (este), de los 31 que conforman México, han modificado sus respectivos códigos civiles para avalar el matrimonio gay. Un cuarto, Campeche, ha aprobado legislación que solo falta implementar.
Pero en junio de 2015 la Suprema Corte de Justicia de la Nación emitió un fallo que obliga a los jueces a conceder un recurso de amparo a las parejas homosexuales que deseen casarse.
En el día nacional de la lucha contra la homofobia, Peña Nieto se pronunció a favor de que «los matrimonios se realicen sin discriminación de discapacidad, de condición social, salud, religión, de género o preferencias sexuales».
Con esta iniciativa «quedaría explícito el matrimonio igualitario en nuestra nación como lo ha determinado la Suprema Corte de Justicia», dijo el mandatario, quien consideró indebido que las parejas gay tengan derechos en algunos estados y en otros no.
Debate sobre homosexualidad
salió a plena luz en Túnez
El debate sobre la homosexualidad sale a plena luz en Túnez, con emisiones de televisión dedicadas al tema o la reciente exposición de una bandera arco iris en la principal arteria de la capital, pero el rechazo social es aún grande y la legislación hostil.
La defensa de los derechos de lesbianas, gays, bisexuales y transexuales (LGBT), durante mucho tiempo tabú o discreta, se afirma poco a poco tras la revolución de 2011, y la consecuente liberación de la palabra. Varias asociaciones han nacido desde entonces, como Mawjoudin («Existimos») o Shams («Sol»).
El debate ha irrumpido en el escenario público ya desde la pasada primavera boreal, con claros llamados de las asociaciones a despenalizar la homosexualidad.
AFP