La música que nutre al invento viene por vía inalámbrica desde un móvil o cualquier otro reproductor
Parece una diadema de control telepático salida de una distopía hollywoodiense, pero es el sustituto más elegante de los auriculares convencionales. Se llama Batband, y funciona gracias a la transmisión de sonidos a través de los huesos del cráneo.
Sus tres transductores –uno situado en la parte trasera de la cabeza y los otros dos por encima de las orejas– transforman las señales eléctricas en ondas sonoras que hacen vibrar los huesos del cráneo en su camino hasta el oído interno, donde el nervio auditivo las convierte en impulsos eléctricos que llegarán al cerebro con una orden tajante: ¡que empiece la fiesta!
La música que nutre al invento viene por vía inalámbrica desde un móvil o cualquier otro reproductor, y se controla con una interfaz táctil que también permite responder a las llamadas entrantes. Los oídos quedan libres, así que las posibilidades de que no escuches ese frenazo del autobús que podría haberte aplastado se reducen significativamente.
Este despliegue tecnológico no es nuevo –hace años que existen los auriculares que funcionan bajo el mismo principio físico–, pero es la primera vez que lo vemos en esta forma futurista.
El ingenio es responsabilidad de Studio Banana Things, una firma de diseño de accesorios y productos de uso cotidiano que ha financiado el proyecto gracias a las aportaciones recibidas en Kickstarter, la plataforma online de crowdfunding.
Si quieres los auriculares, puedes pedirlos en la web de sus creadores: eu.studiobananathings.com. Su precio: 179 euros.