«¡No tocar!»
Ese letrero fue ignorado por un niño de 5 años que destruyó una escultura de casi dos metros hecha de miles de piezas de Lego en China.
La estatua, una réplica gigante del zorro Nick Wilde, personaje en Zootopia -la última película animada de Disney- acababa de haber sido puesta en exposición.
Le tomó al artista Zhao tres días y noches armarla, a un costo de unos US$15.000.
Los padres del menor ofrecieron pagar por los daños, pero Zhao reconoció que «el niño no tuvo la intención» de dejarla como se ve en la foto publicada un poco más abajo.
La escultura consistía de miles de piezas de Lego que formaba parte de una exposición en Wanda Plaza, uno de los muchos centros comerciales de Wang Jianlin, el hombre más rico de China.
Tan pronto fue desplegada, decenas de niños se acercaron con sus padres que querían tomarles fotos al lado del gran Nick Wilde.
Según informes, por lo menos cuatro pequeños ignoraron la barrera protectora alrededor de la escultura, hasta que uno tocó la estatua con el dedo, empujándola accidentalmente al piso.
Así no más, la obra que duró tres días y tres noches en elaborar, en solo segundos, terminó hecha añicos en el duro piso del centro comercial.
Más que con el niño, Zhao quedó particularmente disgustado con el hecho que se hubiera desbaratado tan fácilmente.
«Me tomó un gran esfuerzo construir la estatua, especialmente los ojos. Los tuve que alterar varias veces», comentó.
El padre del menor le ofreció disculpas después del incidente, pero el artista se mostró comprensivo y dijo que no estaría buscando compensación por la pérdida.
«El niño es joven y, además, el personal (del centro comercial) también es responsable por no vigilar la escultura», concluyó. BBC
YM