Durante la sesión ordinaria de este jueves, el Parlamento aprobó un acuerdo que rechaza la violencia en todas sus formas y las agresiones ocurridas contra un grupo de periodistas la semana pasada en las manifestaciones registradas en la avenida Fuerzas Armadas de Caracas
La Asamblea Nacional aprobó este jueves el Proyecto de Acuerdo en rechazo a agresiones y violaciones de derechos humanos a periodistas venezolanos y el Acuerdo en rechazo por violencia generada en la Parroquia 23 de Enero.
Durante la plenaria la diputada Delsa Solórzano cuestionó que “los colectivos tengan armas de guerra y el Gobierno no haga nada”, reseñó el portal web del diario Versión Final.
“¿Cómo es posible que colectivos poseen armas de guerra y el Gobierno no informa nada?”
Aseveró que en Venezuela circulan 15 millones de armas de fuego ilegales y lamentó que los venezolanos tengan que ser víctimas de represiones, a la “vista gorda del Estado”.
El periodista Deivis Ramírez, de El Universal, denunció que fue víctima de la violencia y le fue robado su celular.
Ramírez hizo un llamado al encuentro nacional, al tiempo que declaró que «es inaceptable» que un funcionario de la administración pública incentive a la intolerancia entre los venezolanos.
Por su parte, el diputado Ivlev Silva manifestó que “hay familias que han perdido seres queridos, en manos de grupos armados, denominados colectivos”.
Afirmó que “el Gobierno es enemigo de la paz y del diálogo”. Indicó que como jóvenes no pueden permitir que el Gobierno los “intimide”.
Igualmente, el diputado Jorge Millant coincidió que en el país hay funcionarios que agreden a los venezolanos por reclamar sus derechos.
“No es posible que tengamos una FAN que se dedica a perseguir madres que buscan comida, en vez de custodiar las calles”.
Exigió que se inicie un proceso de pacificación en el país.
Entretanto, el diputado por el Gran Polo Patriótico, Francisco Torrealba condenó los hechos violentos, como de los que fue víctima el diputado Julio Borges.
Señaló que no quieren que en el país se llegue a una confrontación infructuosa.
“Los que tenemos hijos e hijas no queremos que este país llegue a una confrontación, estéril además”.
Asimismo, destacó que “el Estado venezolano no auspicia ninguna forma de violencia”, puesto que el Gobierno del Presidente Maduro es un “Gobierno de paz”.