El Salvador logró una reducción significativa de los homicidios tras dos meses de lucha frontal de la policía y el ejército contra las pandillas, aunque analistas advierten que la ofensiva debe ser continua para desarticular las bandas.
Con la entrada en vigencia de medidas extraordinarias adoptadas por el gobierno, el número de homicidios descendió en mayo a 353, cifra idéntica a la de abril, mientras que en marzo se registraron 611, 664 en febrero y 740 en enero, informó el Instituto de Medicina Legal.
A pesar de la reducción de muertes en los últimos dos meses, el balance de lo que va de 2016 es de 2.721 muertes violentas, cifra que supera las 2.188 de igual período de 2015.
AFP