Los funcionarios que trabajan en la parada ubicada en la estación Miranda del Metro de Caracas humillan a quienes suelen reclamar el mal servicio que presta el sistema
Todos los días siguen aumentando las quejas en contra del personal del Sistema Integral de Transporte Superficial(Sitssa) que labora en la parada ubicada en la estación Miranda del Metro de Caracas, por un lado por el mal servicio que prestan, y por el otro por el maltrato a los usuarios que reclaman precisamente el constante retraso de las unidades.
Pese a que las denuncias no han trascendido concretamente hacia los organismos públicos que deben procesarlas (porque muchas veces se quedan en el lugar de los acontecimientos y la gente termina resolviendo su regreso a casa en otro transporte), todos los días se producen escaramuzas entre el personal del sistema y los usuarios. El martes en la noche, el funcionario que se encarga de “ordenar” la cola de los usuarios que toman la ruta Miranda-Guatire, disolvió la cola de los “parados” a su antojo, en un arrebato de ira y afectando a justos por pecadores, porque uno de los usuarios le reclamó que privilegió a algunas personas por encima de quienes tenían rato esperando por abordar.
“Tú sí eres arrecho”, le gritó el usuario, molesto por el ventajismo. “Yo sí soy arrecho, y para que veas que soy arrecho, ahora ninguno de ustedes se va en la próxima unidad”, contestó el funcionario. “No hay cola de parados, me hacen el favor y se van a hacer su cola; ahora se van cuando yo diga”, insistió.
El usuario, evidentemente, contestó la afrenta, aunque terminó abordando otro servicio. Y todos los demás disolvieron la cola de “parados”, pero advirtiendo que el funcionario estaba cometiendo un abuso.
El caso es que ese funcionario que intenta “ordenar” la cola hacia Guatire no ordena nada en realidad. Unos días permite la cola de parados, otras no; al siguiente día le marca los tickets a quienes se quieren ir parados y muchas veces permite abordar a gente que ni siquiera hizo cola, una situación que obliga a los usuarios a adivinar a diario el sistema que aplica para el momento de retornar a casa. Y no son pocas las personas que le reclaman a ese funcionario, pero, como ya lo dijo el martes en la noche, “es arrecho” y al parecer apoyado, porque día a día sigue maltratando a la gente delante del resto del personal del sistema, dejando ver una conducta muy poco humanista y menos revolucionaria, contrariando las directrices de país potencia y eficiente que a diario pregona el presidente Nicolás Maduro.
Retrasos diarios
Pese a las promesas del entonces ministro del Poder Popular para el Transporte y hoy diputado, Haiman El Troudi, en el sentido de que el sistema se planteaba una regularidad de quince minutos entre una unidad y otra, lo cierto es que los pasajeros pasan horas esperando en las colas. Específicamente los usuarios de Guatire se quejan constantemente por la tardanza de las unidades, tanto para bajar a la capital del municipio Zamora como para subir a Caracas (este miércoles, entre 9:15 y 9:35 de la mañana, llegaron tres unidades al terminal Antonio José de Sucre de Guatire y ninguna cargó pasajeros para Miranda, pese a que la cola estaba bastante larga y la última unidad había salido casi una hora antes).
Y no solo eso, en horas nocturnas, el desembarque de las unidades es justamente en el terminal de pasajeros, sin entrar a la ciudad, por lo cual los usuarios tienen que caminar más de doscientos metros para conseguir otro transporte hacia sus respectivos hogares y desafiando los altos niveles de inseguridad del país en los actuales momentos.
En la parada del Sitssa ubicada en la estación Miranda del Metro de Caracas salen autobuses hacia Guarenas, Guatire, la urbanización Las Rosas (Guatire), Caucagua, Río Chico e Higuerote, a precios por debajo del transporte público.
Improvisación total
Tras anunciar hace meses el aumento de las tarifas por el orden del 240 % en todas sus rutas, lo cual colocaba a los autobuses Sitssa con precios equiparables al del transporte público urbano, esta semana se implementó un nuevo ajuste que dejó el pasaje en 45 bolívares en las rutas entre Miranda, Guarenas, Guatire y Las Rosas.
Sin anuncios de ningún tipo, sin avisos, el pasaje dejó de costar 85 bolívares (tarifa implementada durante una semana y que sigue colocada como válida en la página web del ente público) y pasó a costar 45, lo que evidencia una gran improvisación en las políticas implementadas por el sistema.
Pero no es solo la improvisación en la implementación de las tarifas. Los funcionarios del Sitssa tampoco dan respuestas a los usuarios que compran boletos por adelantado y que no pueden canjear los mismos porque sencillamente ese punto no se tomó en cuenta para quienes aún tienen boletos de Bs.25 ni para quienes compraron boletos de Bs.85.
Edward Sarmiento
@edward42r