Tema internacional

Día Mundial de los Refugiados y Refugiadas

El drama de los refugiados es alarmante no solo por el número (se calcula que hay en el mundo 63,5 millones de desplazados), sino por las situaciones de violación de sus derechos fundamentales

 

Desde el año 2001 se conmemora el Día Mundial de los Refugiados, mediante la Resolución 55/76 de la Asamblea General de las Naciones Unidas, intentando ofrecer ayuda a los millones de personas que se desplazan forzosamente de sus países debido a conflictos bélicos, hambruna o por desastres naturales. En los actuales momentos, el drama de los refugiados es alarmante no solo por el número (se calcula que hay en el mundo 63,5 millones de desplazados), sino por las situaciones de violación de sus derechos fundamentales. Nunca como hoy es tan dramática su situación y vemos con asombro las medidas que han tomado algunos países europeos.

Veamos con detalle ciertas medidas tomadas por algunos países. En Dinamarca, por ejemplo, su parlamento aprobó una norma que autoriza la confiscación de bienes a los refugiados, así como demorar la llegada de sus familiares y aplazar la residencia. Además de reducir las prestaciones sociales y el endurecimiento de los permisos de residencia.

Hungría, por su parte, instaló vallas en sus fronteras con Serbia y Croacia a finales del año 2015 para evitar que los refugiados entraran al país. Asimismo, autorizó al Ejército y a la Policía el empleo de armas no letales para contener las llegadas, ya que según la nueva legislación es un crimen la entrada ilegal en su territorio que se castiga con la cárcel.

En Reino Unido obligaban a los refugiados a llevar un brazalete rojo, hecho que ocurrió a principios de este año, pero debido al descontento y desprecio, la medida fue suspendida. Al noreste de Inglaterra, las puertas de sus viviendas provisionales fueron pintadas de color rojo. Este hecho suscitó numerosas agresiones xenófobas. Por su parte, Suiza exige a los refugiados que llegan a ese país entregar al Estado los activos que tengan un valor superior a mil francos suizos (unos 913 euros), para pagar su mantenimiento.

Lo que menos se observa en los países europeos son reales intenciones y acciones para enfrentar el drama humanitario de los refugiados. Las palabras del secretario de la ONU, Ban Ki-Moon: «Los refugiados son personas como las demás, como tú y como yo. Antes de ser desplazados, llevaban una vida normal y su mayor sueño es recuperarla. En este Día Mundial de los Refugiados, recordemos a la humanidad que nos es común, celebremos la tolerancia y la diversidad y abramos nuestro corazón a los refugiados en todo el mundo», parecen ser solo palabras bonitas que se las llevará el viento y los refugiados y refugiadas seguirán viviendo un verdadero calvario para lograr su sueño de una vida mejor y en paz.

Carolina González

Profesora de la Escuela de Estudios Internacionales

FACES-UCV

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