Ante la grave situación, los residentes han establecido 3 puntos para enfocar la problemática del hospital: infraestructura, recursos humanos y falta de insumos
Los gremios de la salud que hacen vida en el Hospital de Niños José Manuel de los Ríos de Caracas se mantienen en vigilia por las precarias condiciones de funcionamiento de la instalación, afectado por la falta de insumos médicos y el deterioro de la infraestructura, entre otras problemáticas.
El doctor Alejandro Ferrer, cirujano pediatra y presidente de la Sociedad Médica del Hospital de Niño, afirmó que pronto no se podrá atender a los pacientes que sufran apendicitis. «La situación del hospital es muy grave, hemos acudido tanto al Poder Ejecutivo como al Legislativo para obtener respuestas. Queremos que, con cifras en mano, la Asamblea Nacional incluya el caso del J.M. en la discusión política», dijo.
Los representantes del hospital aseguraron que solo han mantenido una sola reunión con la representante del despacho de la Ministra de Salud, Luisana Melo, y con el doctor Earle Siso, director metropolitano de salud. «Nos prometieron que no habría más pañitos de agua para el hospital; esperamos una nueva reunión la próxima semana», añadió Ferrer.
Cabe destacar que los residentes han establecido 3 puntos claves en la problemática del hospital: la infraestructura, recursos humanos y la falta de insumos. El recinto ha sido «víctima», como lo calificó el doctor, de una serie de remodelaciones que «han arrinconado a los servicios» a lugares sin condiciones de salubridad, espacios que tienen problemas de tuberías de aguas negras y son insalubres.
Ferrer reiteró que el presidente Nicolás Maduro se comprometió a conseguir una nueva sede cuando era canciller, es decir, hace 5 años. Sin embargo, pasaron los cargos y el hospital continúa en las mismas condiciones.
Por otra parte, el vocero médico comparó a un taxista que gana 5 mil bolívares diarios mientras que los médicos están ganando 10 veces menos, unos 500 bolívares diarios. «Los médicos ganamos menos del sueldo mínimo”, y señaló ese como el motivo que explica la migración de médicos del sector público al privado y a otros países. Los diversos sectores no pueden pretender, en base a un apostolado moral de servicio y sacrifico, que además ya existe, que un médico devengue 500 bolívares diarios, cuando la vida en el país funciona a base de casi 10 mil diarios», recalcó.
El hospital llegó a tener, en un momento dado, hasta ocho especialistas en materia de cirugía pediátrica; hoy solo tiene cuatro, lo que significa que el servicio pasa muchos días sin guardia y no presta atención en las tardes.
«Lo ideal, si funcionara todo a la perfección, es que el servicio de cirugía contara con al menos 14 adjuntos. En cuanto a quirófanos, el hospital cuenta con 9 estructurales. Operativos solo están dos y desde el pasado jueves no funciona ninguno porque se dañaron los aires acondicionados», aclaró Ferrer.
Finalmente, el cirujano pediatra resaltó que los aires acondicionados fueron reparados el pasado 27 de junio pero no funcionaron. «Así que los quirófanos siguen cerrados. Los casos están siendo remitidos a otros hospitales que también tienen problemas. El hospital, que atiende a una de las poblaciones más vulnerables como lo son los niños, tampoco cuenta con servicios básicos de laboratorio base, como lo son exámenes de orina y heces». concluyó.
Ysabel E. Atique
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